Una persona muerta y más de 2,000 afectadas por derrumbes e inundaciones han provocado las últimas tormentas caídas en diferentes sectores del país.
Las fuertes lluvias que han comenzado de manera tardía en la temporada, pero con intensidad, están causando estragos en varias regiones de Honduras.
Desde el domingo, las lluvias y los vientos racheados han afectado al menos cinco departamentos y numerosos municipios del sur, suroccidente y centro del país, generando emergencias que han movilizado a las autoridades en todos los niveles.
Los departamentos más dañados hasta el momento son Francisco Morazán, Comayagua, Intibucá y Santa Bárbara, donde se reportan daños en viviendas, infraestructura y servicios básicos.
La situación está siendo monitoreada de cerca por el Sistema de Emergencia 911, que trabaja en coordinación con la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) y otras instituciones de socorro para atender a la población afectada.
DAÑOS EN VIVIENDAS
El jefe de Operaciones del 911, Luis Salinas, explicó que desde el pasado domingo 1 de junio han contabilizado más de 600 familias afectadas, lo que equivale a unas 2,357 personas.
De esas familias, 113 han sido evacuadas a albergues temporales en distintas localidades. Entre las principales afectaciones resaltan la caída de árboles y postes, deslizamientos de tierra, lluvias intensas y daños en viviendas, además del colapso de muros en diferentes zonas, especialmente en Ocotepeque y Santa Bárbara.
El reporte también confirmó la destrucción de 21 viviendas y colapsos parciales en otros hogares, que dificultan la habitabilidad y exponen a las familias a mayores riesgos ante futuras precipitaciones.
Por otra parte, en Yoro, 27 personas permanecen en albergues habilitados en centros comunales, esperando la calma de las lluvias.