En el marco de la semana conmemorativa al Día de las Personas Privadas de Libertad, en Honduras, la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), mediante la Dirección General de Coordinación Intersectorial y el Programa Acción Solidarias (PROASOL), coordinaron la donación de insumos de bienestar y cuidado para las mujeres privadas de libertad, de la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS).
Los donativos brindados, fueron entregados como una iniciativa para promover el cuidado personal de las 993 mujeres recluidas en este centro penitenciario, el cual fue de mil kits de higiene y cuidado personal para mujeres, 40 kits de alimentos y juguetes para niñas y niños.
Este centro cuenta con un módulo de casa cuna, donde 27 mujeres han dado a luz a sus hijos e hijas.
Además, se hizo la entrega de colchonetas, pañales, medicamentos, nebulizadores, sillas de ruedas, material de bioseguridad, pruebas Covid-19, pruebas de embarazo, filtros para agua, material de uso clínico, material de aseo, ollas, entre otros.
También por parte de la Dirección de Género, se han otorgado consultas y exámenes ginecológicos y de mama con médicos especialistas para garantizar su bienestar en esta importante área de la salud.
La entrega de estos donativos, fue desarrollada con el acompañamiento de la Secretaría de Derechos Humanos y el Comité Nacional de Prevención Contra la Tortura, Tratos Crueles Inhumanos y Degradantes (CONAPREV).
“Hemos traído estos donativos para paliar algunas necesidades, pero brindaremos más que eso, les daremos apoyo en formación técnica, capacitaciones, formación de proyectos de arte y cultura y empoderamiento a las mujeres, y esto no es un discurso demagógico y de falsas promesas, en el Gobierno de la presidenta Xiomara Castro sí se cumple”.
“Serán atendidas sus principales necesidades a través de la PROASOL, que es el brazo ejecutor de la SEDESOL que atiende a las poblaciones vulnerables en Honduras”, manifestó Olga Lydia Díaz, directora de PROASOL.
Además, la abogada Naama Ávila expresó que desde la SEDESOL se trabajará en la preparación de condiciones necesarias para la reinserción social de las mujeres privadas de libertad.
Una vez que ellas cumplan su condena, se puedan adaptar de manera inmediata y se crearán condiciones para otorgarles el apoyo legal necesario para que sus casos sean retomados por abogados competentes y no queden sin ser resueltos.
En Honduras existe una alta sobrepoblación de personas en el sistema carcelario, y según datos del Instituto Nacional Penitenciario (INP), la población carcelaria a nivel nacional era de aproximadamente 21,670 según proyecciones del año 2020.
Es así como para Erika Rodríguez, directora del PNFAS, este es un importante primer paso con la SEDESOL, para mejorar las condiciones de vida de las mujeres recluidas en este centro y espera seguir contando con este apoyo.
Uno de los retos más grandes que enfrenta ese centro penitenciario es el hacinamiento, ya que este proporciona condiciones de extrema limitación a las privadas de libertad, ya que no han sido estructurados para atender y garantizar los derechos fundamentales de las personas mientras cumplen su condena.
Es así como desde el Gobierno Solidario de la Presidenta Xiomara Castro, y en el cumplimiento del proyecto refundacional socialista democrático, se estableció una agenda en la que ordena dar urgente prioridad de atención a las personas con mayor grado de vulnerabilidad, como son las mujeres privadas de libertad.