Con solo 18 años, el alpinista nepalí Nima Rinji Sherpa, está a punto de conseguir un gran logro. Con 13 de las montañas más altas ya conquistadas, está a tan sólo una más de convertirse en la persona más joven en alcanzar las 14 cimas que superan los 8.000 metros.
Sherpa, que ya tiene múltiples récords por ascensos, afirma que su misión es “inspirar a nueva generación y redefinir el montañismo”.
Su desafío final, el Shishapangma en el Tíbet, le espera el mes que viene, siempre que China le otorgue el permiso.
Subir los 14 ‘ochomiles’ es considerado como el gran reto de los alpinistas. El escalador italiano Reinhold Messner fue el primero en realizar esta hazaña en 1986 y desde entonces sólo 40 escaladores más lo han conseguido.
Las 14 montañas están en el Himalaya y en las cordilleras vecinas del Karakorum, que se extienden por Nepal, China, India y Pakistán.
Alcanzar cada cima requiere entrar en una zona de aire que se califica como “muerta” debido a que no hay suficiente oxígeno para poder respirar durante mucho tiempo. “Cuando estoy en las montañas, puedo morir en cualquier momento. Necesitas ser consciente de lo importante que es tu vida”, explica el joven alpinista.
Nima Rinji Sherpa sostiene que las montañas le enseñaron a mantener la calma. “Mentalmente, me he convencido a mí mismo… Cuando veo una avalancha, mal tiempo, un accidente, no tengo prisa, no pierdo los nervios”, añade.
– ‘VALOR REAL DE LA VIDA’ –
Proveniente del grupo étnico de los sherpas, famosos por sus habilidades y resistencia en la montaña, este adolescente no es ajeno a los terrenos peligrosos.
Su tío, Mingma Gyabu ‘David’ Sherpa, actualmente ostenta el récord de ser la persona más joven en subir los 14 ‘ochomiles’. Lo logró en 2019 cuando tenía 30 años.
Su padre, Tashi Sherpa, creció en el remoto distrito de Sankhuwasabha, pastoreando yaks antes de iniciarse en el alpinismo cuando era adolescente junto a sus hermanos.
Ahora, estos hermanos emprendedores lideran la mayor compañía de expediciones de montaña en Nepal, llamada Seven Summit Treks.
“Vengo de una familia privilegiada”, incidió, “pero ir la montaña me enseñó lo que son las dificultades y el valor real de la vida”.
Al crecer en la bulliciosa capital de Nepal, Katmandú, Sherpa prefirió primero jugar al fútbol y le interesaba más el cine y la fotografía que seguir los pasos de su padre.
“Mi familia entera viene de la montaña. Siempre estuve cerca de ella y de las expediciones”, explicó, “pero nunca quise ser alpinista”.
En vez de eso, llevaba su cámara de fotos a las montañas durante las vacaciones escolares.
Pero hace dos años, dejó la cámara para dedicarse a escalar y desde entonces bate récords.
En agosto de 2022, Sherpa subió su primer ‘ochomil’ al alcanzar la cima del Mount Manaslu (8.163 metros). Con tan solo 16 años fue el primer adolescente en lograrlo.
La última montaña que escaló fue el Kanchenjunga en junio, batiendo de nuevo el récord de ser la persona más joven en subir la tercera montaña más alta de la tierra.
“Aprendí muchas cosas sobre la naturaleza, el cuerpo humano y la psicología de las personas. Todo lo que hay en el mundo, lo aprendí de la montaña”, confiesa Nima Rinji Sherpa.
– ‘INSPIRAR A LOS RECIÉN LLEGADOS’ –
Cuando no está en la montaña, corre en la cinta cada día y evita la comida basura.
“Física y mentalmente debes estar en forma para escalar una gran montaña”, le dijo su padre Tashi Sherpa.
“Inspirará a los recién llegados” al montañismo, declaró su progenitor.
Los guías de Nepal – normalmente la etnia de los sherpas proceden de los valles que rodean al Everest – están considerados como la columna vertebral de la industria del alpinismo en el Himalaya.
Ellos acarrean la mayor parte del equipo y la comida, arreglan cuerdas y reparan escaleras.
Durante mucho tiempo, los sherpas estuvieron a la sombra de sus clientes extranjeros – subir al Everest cuesta más de 45.000 dólares (40.000 dólares) – pero ahora los montañeros nepalíes están siendo cada vez más reconocidos por derecho propio.
“Me gustaría que el alpinismo fuera deporte profesional”, señala.
Su héroe es Tenzing Norgay Sherpa, la primera persona junto al neozelandés Edmund Hillary en subir el Everest, la montaña más alta del mundo.
Para el joven, Tenzing Norgay es para el alpinismo lo que Lionel Messi o Cristiano Ronaldo para el fútbol.
Pero, tras haber visto el impacto del cambio climático y la comercialización de la escalada, él es partidario de realizar una aproximación sostenible a la montaña.
“Cuando empecé a escalar, lo hacía sólo para mí mismo. Pero ahora, me di cuenta de que podemos hacer muchísimo desde los deportes de montaña y ayudar de varias formas a la comunidad”, finaliza este joven alpinista de Nepal.