Hasta Tegucigalpa llegaron más de 50 líderes y representantes de unas 13 comunidades de Tocoa, Colón, que apoyan un proyecto minero y se reunieron con autoridades del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH) para pedir protección ante las reiteradas amenazas y ataques sufridas de parte de un grupo de falsos ambientalistas que opera en la zona.
Julio César Hernández, defensor de derechos humanos y presidente de la Federación de Patronatos, del sector montaña de Tocoa, relató que acudieron a Conadeh, porque en las comunidades necesitan protección, ya que aseguró que la gran mayoría apoya el proyecto minero, pero un grupo de falsos ambientalistas de Guapinol, la comunidad más lejana de la mina, ha matado ya a 10 personas solo por trabajar en la minera o respaldarla.
“Los que vivimos en 13 comunidades apoyamos el proyecto minero de Los Pinares y solo por eso estamos siendo atacados y perseguidos por un grupo de la zona que se opone por sus propios intereses que nada tienen que ver con cuidar el medioambiente. Esto tiene que acabar, porque no lo pueden matar a uno por querer trabajo, educación y salud para nuestros hijos”, declaró Hernández, quien llegó encabezando el Comité por la Paz y el Desarrollo de Tocoa que se reunió con Conadeh.
El grupo que llegó a Conadeh era de más de 50 personas, entre los cuales también iban viudas y madres de las personas que fueron asesinadas por apoyar el proyecto minero.
“Dejaron un gran vacío en mi familia y yo quedé sola. Vivo en depresión. Mataron a mi esposo solo por trabajar en la minera Los Pinares. Eso no es justo”, contó entre lágrimas una de las mujeres que viajó con el grupo hasta Conadeh.
Los representantes de las comunidades y patronatos que viajaron a Tegucigalpa son de las zonas de Tocoa de: San José de García, La Laguna, Brisas de Corozales, Corrales de Piedra, Asentamiento Campesino La Lempira, Cayo Campo, Ceibita Comunidad, Colonia Gracias a Dios, Ceibita Colonia, La Concepción, Santa Rosita y La Coroza, también representantes de sociedad civil y sector privado del municipio, así como universidades, Centro de Rehabilitación Integral de Colón (Cricol); miembros de la Asociación de Ambiente, Derechos Humanos y Justicia (ADJ) y viudas de víctimas de la delincuencia que afecta Tocoa, entre otros.
El proyecto apoyado por las comunidades de Tocoa es el desarrollado por la empresa Inversiones Los Pinares, que construye una planta de peletizado y exportará óxido de hierro al iniciar operación este año.
Ediberto Alemán, presidente de la Asociación de Ambiente, Derechos y Justicia (ADJ), lamentó los ataques contra estas comunidades.
“Nos preocupa que estos habitantes estén siendo blanco de amenazas y ataques por apoyar el proyecto y que se han justificado esas acciones violentas usando la desinformación mediante la cual han dicho que hay contaminación, cuando los estudios han comprobado que no es cierto. Nosotros ante las denuncias hicimos una investigación, pero lo que se halló es que la empresa en la zona cumple las medidas medioambientales”, dijo.
Lucia Pérez, de la comunidad de La Laguna, en Tocoa, manifestó que quieren protección, porque no se puede permitir que los amenacen ni ataquen por apoyar la mina, que consideran los ha beneficiado. “Aquí no teníamos ni para comer, pero con la llegada de la empresa hay oportunidades de trabajo para los jóvenes”.
El Comité por la Paz y Desarrollo de Tocoa llegó acompañado de representantes de la sociedad civil del municipio, organizaciones, universidades y sector privado, entre otros, que afirman que tienen derecho a la vida, el trabajo, salud y educación.
Los líderes comunitarios pidieron a Conadeh su apoyo para que se respete su derecho al trabajo, la vida, la educación y salud, lo cual por fin están teniendo con la llegada de la mina, afirmaron los habitantes de Tocoa.
El viernes pasado, los líderes de las comunidades de Tocoa y representantes de la sociedad civil se reunieron con representantes de derechos humanos de la Embajada de Estados Unidos en Honduras para pedirles también apoyo en que se respeten sus derechos humanos y que no se les siga criminalizando ni amenazando por estar a favor del proyecto minero en la zona.
Esta semana, el Comité por la Paz y Desarrollo de Tocoa se reunió con autoridades de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) para pedirles ayuda también para que los habitantes de las comunidades no sigan siendo atacados por su respaldo al dicho proyecto minero.