Una paciente de 61 años, que permanecía ingresada en la sala COVID-19 del Instituto Nacional Cardiopulmonar (INCP), conocido como el Hospital del Tórax, murió por las complicaciones que le ocasiono el virus.
La portavoz del centro asistencial, Nía Carbajal, detalló que la mujer tenía dos dosis de la vacuna Moderna y padecía algunas enfermedades de base, ella era originaria del Distrito Central.
“Ella se encontraba en al Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Por ahora cuatro pacientes permanecen ingresados, dos de ellos graves, uno crítico y uno estable”, detalló Carbajal.
Al tiempo que hizo un llamado a la población a continuar con los protocolos de bioseguridad y cumplir con el esquema de vacunas para evitar desarrollar un cuadro grave de la enfermedad que puede ocasionar más muertes por causas del virus.
En los primeros días de este año la Secretaría de Salud (Sesal), ha confirmado que 41 hondureños se mantienen hospitalizados por contagio de COVID-19 y tres permanecen en la UCI.
Mientras que 28 de los hospitalizados están en condiciones estables, nueve presentan un cuadro grave y uno esta en condiciones criticas por las complicaciones que genera el virus.