El escenario político hondureño sumó un giro inesperado, cuando Mario Enrique “Chano” Rivera Callejas, candidato presidencial del Partido Demócrata Cristiano (DC), anunció que renuncia a su aspiración y se incorpora oficialmente al proyecto del Partido Liberal, encabezado por Salvador Nasralla.
El anuncio se realizó durante un multitudinario cierre de campaña en San Pedro Sula, donde ambos líderes compartieron tarima a pocos días de las elecciones generales del 30 de noviembre de 2025.
Rivera explicó que su decisión responde a un momento crucial para el país: “Por el bien de Honduras y para unir fuerzas en un momento decisivo, nuestro partido respaldará la fórmula de Salvador Nasralla”, afirmó.
La adhesión de Rivera fortalece la candidatura de Nasralla, quien participa en su cuarto proceso electoral presidencial y ha sido denominado por la prensa como “el candidato de las alianzas”.
Nasralla, de 72 años, ya fue clave en 2021 para que el partido Libre alcanzara el poder, y ahora busca revertir ese escenario desde la plataforma liberal.
Rivera, empresario y consultor político, había iniciado su campaña con propuestas centradas en valores cristianos y en la defensa de la familia, pero reconoció que la coyuntura nacional exige unidad.
Su respaldo se suma a otros sectores que han manifestado apoyo a Nasralla en las últimas semanas, consolidando un bloque opositor frente al oficialismo.
Las elecciones de noviembre se desarrollan en medio de un ambiente de alta polarización y denuncias de irregularidades en la logística electoral. Según el Consejo Nacional Electoral (CNE), más de 5 millones de hondureños están habilitados para votar en comicios que definirán la presidencia, alcaldías y diputaciones.
Durante el acto en San Pedro Isla, Nasralla agradeció la adhesión de Rivera y destacó que su proyecto busca “unir a los hondureños más allá de colores políticos”.
El candidato liberal reiteró que su campaña se basa en la transparencia y en la promesa de gobernar con “manos limpias”.
El gesto de Rivera, a pocos días de los comicios, representa un respaldo simbólico y estratégico que podría inclinar voluntades en la recta final de la campaña.