Las autoridades hondureñas llevaron a cabo una exitosa operación antidrogas en el norte del país, donde se decomisaron al menos 786 kilos de cocaína ocultos en un camión.
La incautación fue confirmada por el ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, quien anunció la detención de dos personas durante el operativo.
La Policía Nacional y la Dirección Nacional Policial Antidrogas (DNPA), interceptaron un “fuerte cargamento de supuesta cocaína” en un contenedor que transitaba a la altura de Chamelecón, una zona ubicada al sur de la ciudad de San Pedro Sula, la segunda más importante de Honduras.
En sus redes sociales, Sánchez detalló que, además de la carga inicial, se encontraron “dos caletas más en la rastra”, donde la droga estaba oculta en sacos de color rojo, escondidos entre las paredes del furgón.
El ministro de Seguridad también destacó el compromiso del gobierno hondureño para desmantelar las estructuras criminales que operan en el país.

“Seguimos trabajando fuertemente para neutralizar las estructuras criminales”, afirmó, subrayando los esfuerzos continuos de las fuerzas del orden en la lucha contra el narcotráfico.
La operación se llevó a cabo en coordinación con el Ministerio Público, y el camión ahora está bajo inspección en las instalaciones de las Fuerzas Especiales en la ciudad de El Progreso, ubicada en el departamento de Yoro. En esta acción, dos vehículos pesados fueron también asegurados.
Honduras, por su ubicación geográfica privilegiada en el Caribe, se ha convertido en un punto estratégico para los narcotraficantes internacionales, quienes utilizan el país para enviar cargamentos de cocaína hacia Estados Unidos. Empleando aeronaves y embarcaciones rápidas, la nación centralamericana ha enfrentado desafíos significativos en su lucha contra el tráfico de drogas.
La reciente incautación de cocaína destaca tanto los peligros del narcotráfico en la región como el trabajo perseverante de las autoridades hondureñas para combatir este grave problema.