Lo que comenzó como una promesa de campaña, hoy se convierte en una realidad que marca un antes y un después para miles de familias.
La aldea de Támara, ubicada al norte del Distrito Central, ha sido beneficiada con la pavimentación de más de 5 kilómetros de concreto hidráulico, una obra que no solo mejora la conectividad, sino que representa una nueva esperanza para el desarrollo integral de la zona.
Gracias a la gestión del alcalde, Jorge Aldana, y el respaldo de la presidenta, Xiomara Castro, este proyecto ha sido ejecutado con el objetivo de dignificar la vida de más de 30 mil personas que habitan en Támara y comunidades aledañas como El Espino, El Lolo y El Tizatillo.
La obra fue realizada por la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT), bajo la dirección del ministro Octavio Pineda Paredes.
Además de la pavimentación, se anunció el balastro de caminos internos en el Valle de Amarateca, así como mejoras en la cancha comunal de Támara, que ahora cuenta con iluminación, pintura renovada y malla ciclón para actividades nocturnas.
Estas acciones buscan fomentar el deporte, la convivencia y el desarrollo social.
Durante su visita, el alcalde Aldana reafirmó su compromiso con las aldeas del Distrito Central:
La presidenta Castro, por su parte, destacó que estas obras son parte de una estrategia nacional para reducir la desigualdad territorial y garantizar el acceso a servicios básicos en zonas históricamente olvidadas.
Este tramo carretero no solo conecta físicamente a las comunidades, sino que abre caminos hacia nuevas oportunidades económicas, educativas y sociales. Támara ya no es solo una aldea más: es símbolo de transformación y esperanza.