El papa Francisco llamó a la unidad frente a la lógica de los “bloques opuestos” entre el Este y el Oeste, en el segundo día de una visita inédita a Baréin, en gran parte consagrada al diálogo interreligioso.
Francisco, primer papa en visitar el reino predominantemente musulmán del Golfo, insistió en la importancia “del diálogo” y del “papel específico” de la religión con motivo de una cumbre interconfesional en Awali (centro).
“Poderosos se concentran en una lucha decidida por intereses particulares, desenterrando lenguajes obsoletos, redefiniendo zonas de influencia y bloques contrapuestos”, deploró el papa argentino.
Según el pontífice, esta lógica se expresa primero por una oposición entre “Oriente y Occidente”, que “se asemejan cada vez más a dos mares contrapuestos”, una alusión al conflicto en Ucrania denunciado sin descanso por Francisco desde la invasión de Rusia a finales de febrero.
“Se juega con fuego, misiles y bombas, con armas que provocan llanto y muerte”, agregó Francisco, que reiteradamente ha denunciado el uso de la fuerza y la amenaza nuclear.
Al margen de este discurso, el cardenal Pietro Parolin, número dos de la Santa Sede, que se reunió en septiembre con el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, informó a la prensa de “algunas pequeñas señales” de avance en las negociaciones con Moscú.
“Todas las iniciativas de paz son buenas, lo importante es que las emprendamos juntos y que no sean aprovechadas para otros fines”, declaró.
– Llamados al diálogo –
Esta visita del Papa, la segunda a esta región desde su histórico viaje a Emiratos Árabes Unidos en 2019, ocurre entre llamados de las ONG que denuncian la represión política y discriminaciones contra la comunidad chiíta de este país insular de 1,4 millones de habitantes, gobernadas por una dinastía sunita.
A media tarde, se reunirá con el jeque Ahmed al Tayeb, jefe de la prestigiosa institución de islam sunita Al Azhar -con sede en El Cairo-, que visita Baréin al mismo tiempo que el papa, en el marco de un foro interconfesional sobre las relaciones entre Oriente y Occidente, en Awali.
El gran imán de Al Azhar pidió el diálogo entre chiítas y suníes, dos ramas del islam a veces en conflicto en Oriente Medio.
“Hago un llamamiento a los teólogos musulmanes de todo el mundo, sean cuales sean sus sectas, comunidades y escuelas de pensamiento, para que entablen rápidamente un diálogo intraislámico serio a fin de establecer la unidad, el acercamiento y el conocimiento mutuo”, dijo el gran imán en un discurso.
Francisco se expresará a las 16H30 (13H30 GMT) ante el “Consejo de Sabios Musulmanes” en la mezquita del Palacio Real, y luego durante una oración ecuménica en la catedral de Nuestra Señora de Arabia, la iglesia católica más grande de la península, inaugurada a finales de 2021.
– Derecho a la vida –
Con esta visita, Baréin, que formalizó sus relaciones diplomáticas con la Santa Sede en 2000, quiere jugar la carta de la tolerancia para suavizar su imagen, asegurando que el país “no tolera la discriminación”.
Pero nueve oenegés pidieron el martes al papa que “exija públicamente que Baréin ponga fin a todas las ejecuciones, suprima la pena de muerte e investigue seriamente las denuncias de tortura y las violaciones del derecho a un juicio justo”.
A su llegada a Bárein el jueves, el líder de 1.300 millones de católicos abogó por la defensa de los derechos humanos y por condiciones “dignas” de trabajo.
También insistió en la “necesidad de garantizar siempre el derecho a la vida”, “incluso para los castigados”, una alusión a la pena de muerte, todavía vigente en el reino.
El jueves, el papa, que cumplirá 86 años el mes próximo, dijo a los periodistas tener “mucho dolor de rodilla”, una dolencia crónica que le obliga a desplazarse en silla de ruedas.
Desde su elección en 2013, ha visitado una decena de países de mayoría musulmana, entre ellos Jordania, Turquía, Bosnia y Herzegovina, Egipto, Bangladés, Marruecos e Irak.