CATACAMAS, Olancho. — Una profunda tragedia enlutó este sábado al municipio de Catacamas, luego de que Darío Sánchez y su hijo Javier Sánchez perdieran la vida en un accidente de tránsito ocurrido en el tramo entre Las Flores y Bodega, en el sector de Río Blanco.
La noticia se propagó rápidamente entre familiares y vecinos, quienes recordaron a ambos como hombres trabajadores y muy queridos en la comunidad.
De acuerdo con reportes preliminares, el vehículo en el que se conducían perdió el control en una carretera rural afectada por las fuertes lluvias recientes, que han deteriorado gravemente la vía.
Las pésimas condiciones de la calzada, sumadas a la falta de señalización y mantenimiento, son consideradas por las autoridades como factores que pudieron contribuir al fatal desenlace.
Vecinos del sector relataron que, al conocerse la noticia, decenas de personas se desplazaron hasta el lugar del accidente, consternados por la escena.
“Es una tragedia para la familia Sánchez y para toda la comunidad”, expresó una residente identificada como Zaida Zamora, quien denunció en redes sociales las dificultades que enfrentan los pobladores para transitar por esas carreteras en mal estado.
La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), a través de su Observatorio de la Violencia, recuerda que los accidentes de tránsito son la segunda causa de muerte en el país, después de los homicidios.
Solo en 2024 se registraron más de 1,600 fallecimientos por percances viales, una cifra que refleja la urgencia de mejorar la infraestructura y reforzar campañas de prevención.
Las autoridades locales han iniciado las investigaciones para esclarecer las circunstancias exactas del siniestro. Mientras tanto, la comunidad de Río Blanco se prepara para despedir a Darío y Javier, recordados como personas cercanas, trabajadoras y pilares de su entorno. La tragedia deja en evidencia la fragilidad de la vida y la necesidad de atender con urgencia el deterioro de las carreteras en Olancho.