COFRADÍA, Cortés. — Con profundo dolor y sin emitir declaraciones a los medios, familiares y amigos dieron el último adiós a los cuatro hermanos Redondo Mayorquín, víctimas de una masacre ocurrida la madrugada del Jueves Santo, en la ciudad de La Ceiba.
Los restos mortales de Juan David, Deysi Fabiola, Génesis Gabriela y Christian Josué, llegaron la madrugada del viernes al municipio de Cofradía, donde nacieron y donde fueron sepultados, tras una emotiva ceremonia fúnebre.
Los cuerpos fueron velados en la casa de un familiar cercano, para luego ser trasladados en cortejo hacia el cementerio municipal, donde decenas de personas acompañaron su entierro con profundo pesar.
Según familiares, los jóvenes llevaban siete años residiendo en La Ceiba junto a su madre. El padre de los fallecidos permanece en Cofradía, donde recibió los cuerpos para darles sepultura.
La familia evitó brindar declaraciones a la prensa, limitándose a pedir respeto por su dolor. El ambiente en el sepelio fue de consternación, con muestras de solidaridad de vecinos y conocidos.
HIPÓTESIS
El comisionado de Policía, Melvin Flores, confirmó que se han desplegado equipos multidisciplinarios para avanzar en las investigaciones y esclarecer este múltiple crimen.
Flores manifestó que por razones estratégicas se reservan detalles clave del proceso investigativo, mientras se continúa recolectando evidencia que permita dar con los responsables.
Una de las hipótesis que se maneja en el caso apunta a posibles vínculos con actividades de narcomenudeo, aunque no se descartan otras líneas de investigación.
La Policía ha vinculado este hecho con estructuras delictivas ya identificadas, y se trabaja de manera coordinada con los operadores de justicia para evitar que los autores queden impunes.
También se investiga si existe conexión entre esta masacre y el asesinato de otra persona ocurrido un día antes en el mismo barrio de La Ceiba.
El comisionado Flores insistió en que se reforzará el equipo asignado al caso con dos unidades más especializadas, que llegarán desde otras regiones del país.
La población de Cofradía se encuentra consternada por el suceso y exige justicia por el asesinato de los cuatro hermanos, cuyo único vínculo con su tierra natal fue su regreso para ser sepultados.
Pobladores de la zona del suceso, informaron a la Policía Nacional, que en la noche circulan comandos armados de facciones delincuenciales extranjeras, ya que, por el tono y la manera de hablar, los identificaron como venezolanos, que se ya residen en el puerto de La Ceiba y que están en franca pelea por la venta de drogas y el paso de esta por las embarcaciones a Islas de la Bahía y a México.