Un hecho insólito y alarmante se registró en el municipio de Jutiquile, en Juticalpa, Olancho, donde desconocidos profanaron una tumba y posteriormente le prendieron fuego al cadáver.
Se trata de Josué Ángel Portillo (38), ultimado a balazos, el lunes anterior cuando se transportaba a bordo de su camioneta, sobre el bulevar Los Poetas, en Juticalpa.
Portillo fue sepultado, el martes anterior alrededor de las 4:30 de la tarde en el cementerio de Jutiquile, de donde fue extraído violentamente de su nicho, aparentemente en horas de la madrugada.
La denuncia fue interpuesta por la esposa de Josué Ángel Portillo, quien se le omite el nombre debido a que se encuentra amenazada de muerte, al igual que sus hijos y otros miembros de la familia.
Sin embargo, ella en su profunda preocupación clamó ayuda a través de medios de comunicación, aclarando que ha interpuesto la denuncia contra quienes mataron a su cónyuge, en cuatro oportunidades, pero las autoridades policiales de la zona no le hacen caso.
Los delincuentes, supuestos miembros de una banda apodada “Los Barbones” que operan en Santa Cruz del Potrero, un pueblo de Juticalpa, no solo atentaron contra la memoria de su pareja, sino que además mantienen bajo amenaza a su familia, dijo la viuda.
“A mi esposo le hicieron varios intentos de homicidio en vida. Ahora profanan su tumba y seguimos recibiendo amenazas. Han dicho que matarán a mi hijo y a las personas que me apoyan”, expresó la mujer, quien pidió anonimato por temor a represalias.
Los pobladores de la zona exigieron a las autoridades una investigación exhaustiva, pues aseguran que la violencia en el sector continúa en aumento y que este tipo de hechos reflejan la impunidad que impera en la región.
La acongojada mujer dio los nombres de cinco sospechosos, pero ni aún así le hacen caso, de acuerdo con su mismo relato, evidenciando el alto grado de impunidad e ineficiencia en cuerpos de investigación criminal.
En los reportes policiales solo trascendió que Josué Ángel Portillo perdió la vida el lunes 1 de septiembre, un poco después de las 11:00 de la mañana, cuando dos sujetos desde una motocicleta en marcha le dispararon al vehículo en el que se conducía. Gravemente herido, el hombre fue trasladado hasta un centro asistencial privado donde minutos después se confirmó su deceso.
Hasta la tarde de ayer, ni autoridades del Ministerio Público, ni de la Policía Nacional de Honduras, se habían pronunciado para dar a conocer las medidas de protección que le iban a brindar a esta dama, que de acuerdo con pobladores de Jutiquile, corre enorme peligro de muerte.