Alrededor de diez mujeres han sido ultimadas por desconocidos en distintas zonas del país, durante la semana y las mayores hipótesis de los crímenes o femicidios son la distribución de drogas o estar ligadas a “maras” y pandillas.
Ayer se reportó el deceso violento de una jovencita, quien fue ultimada por pandilleros en una casa de la colonia Altos de Las Minitas, cerca de la populosa colonia “21 de Octubre”, ubicada al nororiente de Tegucigalpa.
La víctima fue identificada por sus parientes como Débora Lizeth Barrientos Valerio (19), originaria y residente de la colonia “Modesto Rodas Alvarado 2” y circunvecina a donde fue ultimada a tiros.
Según los informes policiales, Barrientos Valerio fue ultimada a las 6:00 de la mañana de seis balazos en distintas partes de su cuerpo.
La fémina murió al instante, quedando su cuerpo en un callejón de referida colonia. Tras el violento hecho, agentes policiales se presentaron para resguardar el cadáver de la mujer. Hasta ayer por la tarde se desconocían las motivaciones que tuvieron los victimarios para quitarle la vida a otra mujer en la capital.
FEMINICIDIOS
Desde el lunes anterior a la fecha han muerto violentamente unas diez mujeres, en distintos sectores del territorio nacional.
Para el caso, a principios de semana una fémina fue ultimada en La Ceiba, Atlántida, y fue identificada como Ginel Rosemary López Sánchez (23), quien estaba estudiando una carrera universitaria en un centro educativo superior.
Datos preliminares indican que la mujer, de unos 25 años, se encontraba sentada en el corredor de su vivienda, cuando sujetos fuertemente armados ingresaron y le dispararon en reiteradas ocasiones.
El martes anterior también se reportó la muerte violenta de la joven María Fernanda Vásquez Mendoza, de 25 años, en Ciudad España, en la capital.
Mientras, el domingo, otras tres mujeres fueron asesinadas, una de ellas en Esparta, zona Caribe de Honduras, otra en Teupasenti, El Paraíso, y una tercera en la capital.