Con el apoyo financiero del gobierno de Alemania, a través del Banco de Desarrollo Alemán (KFW), el Instituto Nacional de Conservación y Desarrollo Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre (ICF) lanzó la segunda etapa del proyecto “Life Web Initiative”.
La iniciativa es ejecutada por el ICF, a través del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (Sinaph), con el objetivo de lograr efectividad en el manejo sostenible de áreas protegidas marino-costeras para el mejoramiento de las condiciones de vida de las poblaciones, la mitigación de los riesgos del cambio climático y la conservación de la biodiversidad.
La segunda etapa consiste en la implementación de medidas de conservación y manejo de los recursos naturales en 17 áreas protegidas localizadas en el extremo norte y el Caribe de Honduras, mediante el fortalecimiento del comanejo con actores claves, como alcaldías, comunidades, sociedad civil y organizaciones.
GRAN OPORTUNIDAD
El ministro del ICF, Luis Edgardo Soliz, enfatizó que “es una gran oportunidad para el país, contar con inversiones en estas zonas, lo que nos permite destinar recursos a otras áreas protegidas del país que han estado con poca inversión”.
Agregó que “al fortalecer el manejo y la gestión de las áreas protegidas de la zona norte de Honduras, Life Web Initiative, nos viene a dar esa oportunidad como resultado de la unificación de procesos de manejo, estudios, fortalecimiento y sostenibilidad para estar en el involucramiento de las comunidades que viven en interacción con las áreas protegidas”.
El funcionario reconoció que “somos conscientes que un buen trabajo en estas áreas protegidas es de beneficio colectivo de toda la sociedad hondureña”.
Detalló que el área de influencia del proyecto abarca zonas protegidas los departamentos de Cortés, Atlántida, Colón, Yoro e Islas de la Bahía, con una superficie de 1 millón 198,840 hectáreas, de las cuales un 76 por ciento corresponden a sistemas marinos y un 24 por ciento a ecosistemas terrestres.
CONTRATO MILLONARIO
Las inversiones son resultado de la firma de un contrato de aporte financiero y acuerdo separado entre el banco KFW, por 10 millones de euros; y una contrapartida de un millón euros por parte del Estado de Honduras, para fortalecer políticas ambientales de conservación y uso sostenible de los recursos naturales y de adaptación al cambio climático.
La segunda fase, que entra en ejecución, contempla medidas de conservación a través de la implementación de Planes Operativos Bianuales elaborados de forma participativa para mejorar la efectividad de manejo de las 17 áreas protegidas que comprende el portafolio piloto.