El conocido dirigente del Partido Liberal, Arístides Mejía, estima que por la terrible situación social y económica que heredo el gobierno de la presidenta Xiomara Castro, cien días no son suficientes para evaluar su gestión.
Por ende, justificó un compás de espera razonable para evaluar el rumbo y la acción del gobierno de la presidenta, Xiomara Castro, cuyos primeros cien días los cumple el próximo viernes.
Es comprensible que se diga no hay una claridad sobre el rumbo del gobierno, “porque no es una transición normal la que ha ocurrido”, precisó Mejía.
“Entonces en este caso –indicó– yo pienso que lo lógico para juzgar un gobierno que se ha hecho cargo de esta situación catastrófica que heredo del Partido Nacional, es más bien es dar un plazo extra para decir que es lo que este gobierno ha logrado o no”.
Porque todavía el gobierno está en el desmontaje de esa estructura que creo el gobierno anterior y en el acomodamiento de los nombramientos, porque todavía todas las planas de los mandos intermedios son del Partido Nacional, estimó.
Recordó que los del pasado gobierno, no dejaron ni recursos para sus prestaciones, porque hay que recordar que los ex funcionarios de confianza, se recetaron millonarias prestaciones, “algo nunca antes visto, porque en ninguna parte del mundo a este tipo de funcionarios se les da prestaciones”.
DESMONTAR
Por eso el presente gobierno, aún está en proceso de desmontar y muestra de ello es que hasta hace tres semanas se cambió la estructura administrativa que había dejado el ex presidente, señaló Mejía.
“Y sumado a ello –acotó– no se ha estructurado todavía la comisión de lucha contra la corrupción, ya que la Organización de Naciones Unidas (ONU), no ha dado el visto bueno a pesar de que ya se derogo la Ley de Secretos y de las ZEDE pero que aún no se sienten sus efectos”.
Sin embargo, el gobierno, ya ha logrado normalizar las relaciones con los Estados Unidos, que el gobierno anterior no lo pudo lograr, a pesar que la unión americana es el país más importante en temas migratorios, economía y comercio, precisó.
“Pero en el gobierno de la presidenta Castro —reconoció— ya hay significativos avances y además ya se han reestablecido las relaciones con nuestros socios tradicionales de Europa y otros como Japón, Taiwán, entre otros”. Mejía también es del criterio que el respaldo masivo que recibió la presidenta Xiomara Castro en las marchas obreras del pasado primero de mayo es una señal que los sectores populares que por muchos años tuvieron reclamaciones sociales y gremiales, pues también están dando un compás de espera al presente gobierno.