Rusia intensificó sus ataques con misiles contra Kiev, comenzando con un raro ataque diurno que puso a los residentes a correr a los refugios, seguido de un bombardeo nocturno que dejó al menos una persona herida, informaron las autoridades ucranianas.
En otra tanda de bombardeos en el oeste del país, en la noche, las autoridades ucranianas admitieron públicamente que una instalación militar había sido alcanzada, según una de sus escasas declaraciones sobre objetivos militares impactados.
Tras bombardeos nocturnos el domingo que no causaron daños importantes en la capital, las sirenas antiaéreas volvieron a sonar por el lunes la mañana, seguidas de una serie de explosiones hacia las 11H10 locales (08H10 GMT).
“El enemigo efectuó ataques con misiles contra el territorio ucraniano, por la segunda vez en 24 horas”, dijo el jefe del ejército ucraniano, Valery Zalujny, y aseguró que todos los proyectiles de este ataque habían sido derribados.
“En total, 11 misiles de tipo Iskander-M y Iskander-K fueron lanzados desde el norte” contra Kiev y su región, precisó.
Según las autoridades de la ciudad, un hombre resultó herido y fue hospitalizado.
En horas de la noche, Kiev sufrió un nuevo ataque masivo con drones que dejó a una mujer herida, según el alcalde de la ciudad, Vitali Klitschko.
La víctima fue una mujer de 27 años que fue hospitalizada con heridas leves, dijo Klitschko en Telegram.
Los escombros por el derribo de los drones provocaron el incendio en una casa y tres vehículos en distintas partes de la ciudad, indicó la administración civil y militar.
En tanto, el Parlamento ucraniano adoptó un paquete de sanciones contra Irán, aliado de Rusia, luego de que Kiev afirmara que Moscú utilizó drones iraníes Shahed en el mayor ataque con naves no tripuladas contra la capital desde el inicio del a invasión.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, declaró en un mensaje nocturno que “Rusia quiere llegar hasta el fin en este camino del mal” con sus ataques.
– Más ayuda de EEUU –
“El mundo debe ver que el terror pierde. Cuando los (misiles) Patriots en manos de ucranianos aseguran un 100% de derribo de cualquier misil ruso, el terror pierde”, sostuvo Zelenski.
Kiev recibió en abril el primer embarque de misiles defensivos estadounidenses Patriot, y el presidente Joe Biden sugirió el lunes que habría más ayuda en camino.
Consultado sobre los ataques rusos contra Kiev, Biden dijo a periodistas que “no es inesperado” y que “por eso tenemos que seguirle dando a Ucrania todo lo que necesita”.
Ante la intensidad de las explosiones por el derribo de los misiles rusos, muchos habitantes se precipitaron a los refugios subterráneos, sobre todo al metro.
Muchos residentes se habían acostumbrado a ignorar las sirenas, pero los numerosos ataques de este lunes sembraron el pánico.
Un video difundido en las redes sociales mostraba a decenas de estudiantes que corrían y gritaban en una calle del centro de la ciudad.
“Vi seis, siete u ocho explosiones en el cielo. Por eso vine aquí con mis compañeros de trabajo”, dijo a AFP Maksym, un fontanero refugiado en la estación de metro de Khreshchatyk. “Espero a que termine el bombardeo”, añadió.
Rusia ha intensificado sus bombardeos contra la capital ucraniana desde principios de mes, pero hasta ahora eran casi siempre durante la noche.
“Todo el mundo está acostumbrado a (los ataques) de noche, cuando duermes en casa. Pero de día, es nuevo, no había sucedido desde hacía tiempo”, dijo Yevgeny, un programador informático de 39 años.
Restos de misiles derribados cayeron en al menos tres barrios situados en el norte y el este de la capital, lo que causó un incendio, según la administración militar.
“Al principio, empezaron a interceptar misiles como de costumbre. Luego uno de ellos cayó en la carretera. Algunas personas dijeron que incendió un coche”, explicó a AFP Dmytro, un testigo.
– Daños en una instalación militar –
En la región de Járkov, en el este, un bombardeo contra una pequeña localidad causó siete heridos, incluyendo a una mujer embarazada y a niños de entre 10 y 14 años, según las autoridades.
La administración regional de Jmelnitski, en el oeste, indicó que un bombardeo ruso nocturno había dañado una instalación militar, dando a entender que se trataba de un centro de almacenamiento o un aeródromo del ejército.
La administración local informó que el ataque provocó “incendios en un depósito de combustibles” y daños en equipos militares y sugirió que una pista de aterrizaje también quedó impactada.
“Cinco aparatos del aire quedaron fuera de servicio”, precisó la fuente, sin dar más detalles. No trascendió ninguna cifra sobre posibles víctimas.
Se trata de una de las pocas veces en que las autoridades ucranianas han admitido pérdidas militares, desde que Moscú lanzó la invasión en febrero de 2022.
Poco después de este anuncio, el ministerio ruso de Defensa confirmó haber bombardeado en la noche “aeródromos” en Ucrania y haber “destruido” todos los objetivos, entre ellos “material aeronáutico” e “instalaciones que servían para almacenar armas y municiones”.
Por otra parte, las autoridades de la región rusa fronteriza de Belgorod informaron de la muerte de un civil tras un bombardeo ucraniano en la localidad de Grafovka.