MOSCÚ. – El gobierno ruso reclamó este jueves a Polonia la reapertura inmediata de su frontera con Bielorrusia, luego de que Varsovia decidiera cerrar todos los pasos fronterizos como medida preventiva ante las maniobras militares conjuntas “Zapad-2025” entre Rusia y Bielorrusia.
El Kremlin calificó la decisión como “contraproducente” y “una provocación innecesaria que agrava las tensiones regionales”.
La frontera fue cerrada desde la medianoche del jueves, afectando el tránsito terrestre y ferroviario entre ambos países. El primer ministro polaco, Donald Tusk, justificó la medida por “razones de seguridad nacional”, en medio de crecientes preocupaciones por los ejercicios militares que involucran hasta 30.000 tropas ruso-bielorrusas cerca del estratégico corredor de Suwalki.
El cierre se produce tras la incursión de al menos 19 drones rusos en territorio polaco, algunos de los cuales habrían atravesado el espacio aéreo bielorruso.

Polonia, miembro de la OTAN, respondió con el despliegue de 40.000 soldados en su frontera oriental y solicitó consultas bajo el Artículo 4 del tratado atlántico.
Desde Moscú, el Ministerio de Defensa negó que los drones tuvieran como objetivo territorio polaco y sugirió que el incidente fue “manipulado por Ucrania para sabotear las negociaciones de paz”. Bielorrusia, por su parte, afirmó que los drones “perdieron el rumbo” y que incluso derribó algunos en su propio territorio.
Rusia instó a Polonia a “restablecer el tránsito fronterizo y evitar medidas que afecten la estabilidad regional”, mientras diplomáticos rusos en Varsovia denunciaron que el cierre “viola acuerdos bilaterales de cooperación”.
La tensión entre Moscú y Varsovia se intensifica en un contexto de creciente militarización en Europa del Este, donde países como Lituania y Letonia también han reforzado sus fronteras.
Analistas advierten que el cierre fronterizo podría prolongarse más allá del 16 de septiembre, fecha prevista para el fin de las maniobras Zapad-2025.