Rusia acusó a Ucrania ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de haber destruido la represa de Kajovka con bombardeos “masivos” de artillería, y rechazó las acusaciones de Kiev, que dijo que Moscú está detrás de lo ocurrido.
“Ucrania declaró que Rusia voló la represa en Nova Kajovka. En realidad, es Ucrania la que lo hizo”, declaró ante la Corte en La Haya el diplomático ruso Alexander Shulgin.
“El régimen de Kiev no sólo lanzó ataques masivos de artillería contra la represa (…) sino que llevó deliberadamente el nivel de agua del embalse de Kajovka a un nivel crítico”, agregó.
Shulgin, embajador ruso en los Países Bajos, no presentó pruebas para sostener sus declaraciones.
Por su parte, Ucrania afirma que fue Moscú quien detonó la represa que estaba en territorio controlado por Rusia, lo que provocó una enorme inundación.
Ucrania y Rusia presentan esta semana sus argumentos ante los jueces de la CIJ en un caso en el que Kiev acusa a Moscú de respaldar durante años a los rebeldes separatistas en el este de Ucrania.
Ucrania alega en este procedimiento llevado ante la CIJ en 2017 que Rusia transgredió las convenciones de la ONU sobre financiación del “terrorismo” y sobre discriminación racial por su rol en el conflicto en el este de su territorio que estalló en 2014.
Kiev busca compensaciones por los ataques de los rebeldes separatistas, incluyendo el derribo del avión de Malaysia Airlines MH17 en el este de Ucrania en julio de 2014, que dejó 298 muertos.
En línea con el argumento del presidente ruso Vladimir Putin para justificar la invasión de Ucrania en febrero de 2022, el embajador Shulgin dijo que Kiev “no tiene autoridad moral” y que estaba oprimiendo a la población del este del país.
“Este régimen llegó al poder con un violento golpe en 2014 apoyado por nacionalistas que eran descendientes directos de colaboradores de los nazis en la Segunda Guerra Mundial”, dijo.
La defensa de Rusia en el juicio cuestionó las afirmaciones de Ucrania sobre el derribo del MH17 y los ataques de separatistas contra ciudades ucranianas a partir de 2014.
El abogado británico Michael Swainston, que representa a Moscú, dijo a la CIJ que “los perjuicios en los conflictos armados a civiles son inevitables y no implican terrorismo”.
“Y, por supuesto, los soldados también cometen errores”, añadió.
Swainston afirmó que las acusaciones de que Rusia suministró el misil y apoyó a los rebeldes que derribaron el vuelo MH17 se basan en fuentes “digitales disparatadas y sin fundamento”, como las redes sociales.