Los rebeldes hutíes de Yemen anunciaron que llevaron a cabo un ataque contra el portaaviones estadounidense ‘USS Harry Truman’ en el mar Rojo, como respuesta a los bombardeos aéreos de Estados Unidos que, el día anterior, dejaron al menos 31 muertos en varios de sus bastiones, incluida la capital, Saná. En un comunicado, los hutíes, respaldados por Irán, afirmaron haber disparado 18 misiles y un dron en esta operación militar.
El líder de los insurgentes, Abdulmalik al Huthi, reiteró en un mensaje televisado que los hutíes tienen la intención de atacar cargueros estadounidenses mientras continúe lo que él calificó de “agresión” por parte de Washington. Hasta el momento, Estados Unidos no ha confirmado el ataque contra el portaaviones, aunque el presidente Donald Trump había prometido previamente una respuesta contundente a los “terroristas hutíes” tras sus amenazas de atacar barcos comerciales e Israel.
La Casa Blanca informó que en los bombardeos del sábado murieron “múltiples” líderes hutíes. Irán, por su parte, condenó los ataques a Yemen, calificándolos de “bárbaros” y advirtiendo que tomaría represalias ante cualquier ofensiva. Los hutíes, que controlan varias regiones de Yemen, advirtieron que los ataques estadounidenses “no quedarán sin respuesta”, afirmando que sus fuerzas armadas están preparadas para una “escalada por escalada”.
Según el Ministerio de Salud hutí, los bombardeos se dirigieron a Saná, así como a las gobernaciones de Saada y la ciudad de Radá, dejando un saldo de al menos 31 muertos y 101 heridos, la mayoría de ellos niños y mujeres. Malik, un habitante de Saná y padre de tres hijos, expresó su temor ante los bombardeos, describiéndolos como “absolutamente aterradores”.
En un mensaje en su red social Truth Social, Trump anunció una “acción militar decisiva y poderosa” contra los hutíes, prometiendo el uso de una “fuerza letal abrumadora” hasta alcanzar sus objetivos. Los hutíes forman parte de lo que Irán denomina el “eje de la resistencia” contra Israel, que incluye a grupos como Hamás y Hezbolá, quienes también han condenado los bombardeos estadounidenses.
Los hutíes han llevado a cabo ataques con misiles contra Israel y barcos que consideran vinculados a este país, justificando sus acciones como una forma de solidaridad con los palestinos tras el inicio de la guerra en la Franja de Gaza. A pesar de una frágil tregua en Gaza, los hutíes anunciaron su intención de reanudar los ataques contra barcos comerciales que pasan cerca de las costas de Yemen.
En respuesta a las exigencias de Trump para que Irán detenga su apoyo a los hutíes, el general Husein Salami, jefe de los Guardianes de la Revolución, afirmó.