Al menos 32 personas fueron asesinadas por hombres armados que destruyeron decenas de casas en varios ataques el domingo en el noroeste de Nigeria, informaron las autoridades locales el jueves.
Grupos criminales fuertemente armados, conocidos localmente como “bandidos”, llevan años asaltando aldeas del noroeste y centro de Nigeria para secuestrar o matar a sus habitantes, pero sus ataques han cobrado fuerza recientemente.
Los últimos meses, atacaron un tren de viajeros que unía la capital Abuya con la ciudad septentrional de Kaduna y secuestraron decenas de personas, mataron a más de 100 aldeanos y a una docena de miembros de grupo de autodefensa.
El domingo, “unos bandidos atacaron las aldeas de Dogon Noma, Ungwan Sarki y Ungwan Maikori en la zona del gobierno local de Kajuru”, declaró el comisario de seguridad del inestable estado de Kaduna, Samuel Aruwan, en un comunicado.
Los asaltantes “asaltaron la zona llegando en gran número con sus motos y arrasaron varias casas mientras atacaban y mataban a sus habitantes”, dijo.
“Los bandidos atacaron las dos primeras localidades y asesinaron a 31 ciudadanos. Después se dirigieron a Ungwan Maikori, donde mataron una persona y quemaron casas”, explicó.
Las fuerzas de seguridad movilizaron un helicóptero para perseguir a los “bandidos” antes de la llegada de tropas terrestres, añadió.
Según la ONG Acled, estos grupos criminales han matado más de 2.600 civiles en 2021, un aumento del 250% respecto a 2020. Sus víctimas superan ampliamente las de los grupos yihadistas Estado Islámico y Boko Haram, también activos en el país.
El presidente nigeriano Muhammadu Buhari, antiguo general, está presionado para poner fin a esta violencia antes de dejar sus funciones el próximo año tras dos mandatos.