El Hezbolá libanés anunció que bombardeó una base militar en el norte de Israel en respuesta a ataques que mataron a uno de sus combatientes, en momentos de crecientes temores de una escalada bélica regional.
El poderoso movimiento islamista proiraní indicó en un comunicado que lanzó “decenas de cohetes Katiusha” contra “la principal base de defensa aérea y antimisiles” del norte de Israel.
Señaló que procedió a esa andanada de disparos en respuesta a dos bombardeos israelíes, uno de ellos este jueves en Sohmor, en el este de Líbano, y otro la víspera en Nabatiyé, en el sur, donde cinco personas resultaron heridas.
Hezbolá indicó que en el ataque de Sohmor murió uno de sus combatientes. Según la Agencia nacional de Información libanesa (AIN), un dron disparó en esa localidad contra un motociclista.
El ejército israelí afirmó que un miembro de Hezbolá había sido “eliminado en un ataque aéreo en la región de Sohmor” y que sus aviones de combate habían atacado “estructuras militares” en el sur de Líbano.
El movimiento chiita, aliado de Hamás, en el poder en Gaza, también anunció que había llevado a cabo el jueves otros dos ataques contra posiciones militares israelíes, incluido uno con drones, en tanto que ANI dio parte de ataques israelíes en el sur del Líbano.
El ejército israelí señaló que dos drones procedentes del Líbano habían caído en el norte de Israel, sin reportar víctimas.
La frontera entre los dos países registra duelos casi diarios de artillería desde el inicio el 7 de octubre de la guerra de Gaza entre Israel y Hamás.
El temor de una conflagración regional se acrecentó en los últimos días.
El jefe de Asuntos Humanitaria de la ONU, Martin Griffiths, advirtió el miércoles del riesgo “potencialmente apocalíptico” de una extensión al Líbano de la guerra de Gaza.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, declaró el miércoles en Washington que su país no quiere una guerra en Líbano, pero que puede devolver a ese país a la “Edad de Piedra” si fracasa la diplomacia.
Francia se dijo el jueves “sumamente preocupada por la gravedad de la situación en Líbano” y llamó a todas las partes a ejercer “la mayor moderación”.