El embajador ruso en Polonia recibió en su rostro una sustancia roja lanzada por manifestantes pro-ucranianos que le impidieron el paso en Varsovia con motivo del aniversario del fin de la Segunda Guerra mundial, un incidente que de inmediato denunció Rusia.
Militantes proucranianos que gritaban “fascistas” y esgrimían la bandera nacional ucraniana, bloquearon el paso del embajador cuando debía depositar flores en el cementerio de Varsovia donde reposan soldados soviéticos muertos durante la Segunda guerra mundial.
El 9 de mayo de 1945 los rusos celebran la victoria contra la Alemania nazi.
Luego unas personas le lanzaron una sustancia roja a su cara y ropas, y mancharon a las personas que iban con él.
Tras limpiarse el rostro con la mano, Sergueï Andreev declaró “Estoy orgulloso de mi país y de mi presidente”.
Andreev declaró a la agencia de prensa rusa RIA Novosti que no fue herido durante la agresión, y agregó que la sustancia roja era una especie de jarabe.
El incidente fue inmediatamente denunciado por Rusia.
Maria Zajarova, portavoz de la diplomacia rusa, indicó que “los partidarios del neonazismo mostraron de nuevo su rostro y es sangriento”.
Rusia dirigió una “fuerte protesta” a las autoridades polacas “por su indulgencia ante los jóvenes neonazis”.