Dos agentes de inteligencia chinos fueron inculpados en Nueva York por intentar interferir en una demanda en Estados Unidos contra una empresa de telecomunicaciones china.
El Departamento de Justicia acusó a Wang Zhen y He Guochun de obstrucción a la justicia, y a este último también por lavado de dinero.
La acusación señala que pagaron a un informante estadounidense -en realidad un doble agente- que creyeron haber reclutado de una agencia gubernamental para que proporcionara documentos relacionados a un caso legal contra la empresa china, a cambio de bitcoins por valor de 61.000 dólares.
El acta de acusación no especifica el nombre de la empresa involucrada y apenas indica que se trata de un grupo global de telecomunicaciones con sede en China.
Los detalles son similares al caso contra Huawei, el gigante chino de las telecomunicaciones procesado en 2019 en Estados Unidos por robo de secretos comerciales y eludir sanciones, entre otros cargos.
Desde enero de 2019, cuando se anunciaron los cargos contra Huawei, ambos agentes chinos buscaron reiteradamente obtener información confidencial sobre los testigos, las pruebas reunidas para el juicio y posibles nuevos cargos contra la empresa, “en un esfuerzo por interferir con el proceso”.
Reclutaron a su fuente en 2017, pero esta “comenzó a trabajar como agente doble para el gobierno de Estados Unidos”, bajo la supervisión del FBI, precisa el acta de acusación.
El FBI elaboró documentos falsos, clasificados como “secretos”, que luego fueron entregados a los agentes chinos. He Guochun pagó el año pasado unos 41.000 dólares en bitcoins por uno de ellos.
Los agentes chinos reconocieron que transmitieron la información que obtuvieron a la compañía de telecomunicaciones, y que esta última estaba al tanto de la operación de espionaje que continuó hasta 2022.