El presidente chino, Xi Jinping, aseguró a su homólogo ruso, Vladimir Putin, el apoyo de Pekín en materia de “soberanía” y “seguridad” durante una conversación telefónica.
“China está dispuesta a proseguir con Rusia el apoyo mutuo en cuestiones de soberanía, seguridad y otras cuestiones de interés fundamental y preocupaciones importantes”, dijo Xi, según un comunicado de la agencia oficial de prensa Xinhua.
La retranscripción de la conversación no da ningún ejemplo específico, como Ucrania o Taiwán.
Por su parte, el Kremlin indicó que los dos líderes acordaron “ampliar la cooperación en los campos energético, financiero, industrial, de transporte y otros, teniendo en cuenta la situación económica mundial que se ha complicado debido a las sanciones ilegítimas de Occidente”.
Los países occidentales adoptaron sanciones sin precedentes contra Rusia en represalia por su ofensiva contra Ucrania y Moscú considera que europeos y estadounidenses han provocado una desaceleración económica global.
Moscú también está buscando nuevos puntos de venta y proveedores para reemplazar a los que abandonaron el país tras la ofensiva rusa.
Los líderes ruso y chino también discutieron del “desarrollo de las relaciones militares y técnico-militares”, indicó la presidencia rusa, que calificó el intercambio de “cálido y amistoso”.
Xi y Putin también enfatizaron su intención de “construir un sistema de relaciones internacionales verdaderamente multipolar y justo”.
Ante la resistencia ucraniana y la unidad de las democracias occidentales, que han impuesto sanciones sin precedentes en su contra, Rusia solo puede contar con el poder chino para escapar del aislamiento económico total.
En varias ocasiones, las potencias occidentales han advertido a Pekín contra cualquier apoyo al régimen del presidente ruso que permita a Moscú mitigar el impacto de las sanciones.
– “Amistad sin límite” –
La última llamada conocida entre los dos líderes se remonta a febrero, un día después de la invasión rusa de Ucrania.
Desde la intervención del 24 de febrero, China se niega a usar la palabra “invasión” para describir la operación militar lanzada por Moscú en Ucrania y culpa a Estados Unidos y la OTAN.
Las autoridades chinas, cercanas al Kremlin con el que quiere formar un frente común contra Estados Unidos, también se han abstenido de condenar la invasión rusa.
“A pesar de los trastornos globales, las relaciones entre China y Rusia han mantenido una buena dinámica de desarrollo”, dijo Xi el miércoles, y pidió una “coordinación estratégica más estrecha” entre Pekín y Moscú.
El presidente chino también describió su visión para poner fin a la guerra en Ucrania. “Cada parte debe promover una solución apropiada” y “de manera responsable”, dijo Xi, asegurando que China está lista para desempeñar un papel en el proceso.
Desde el comienzo de la guerra en Ucrania no se ha hecho pública ninguna llamada entre Pekín y el presidente ucraniano Volodimir Zelenski.
El presidente chino nunca ocultó su cercanía con Vladimir Putin, que considera un “viejo amigo”. Desde que Xi llegó al poder en 2012, ambos se han reunido más de 30 veces, la última en febrero, en el que fue el primer cara a cara desde el comienzo de la pandemia en 2020.