Las bodas quedaron fuera de los planes de los estadounidenses en 2020: debido a la pandemia de covid-19, Estados Unidos registró ese año apenas 1,6 millones de casamientos, la cifra más baja desde 1963, anunciaron las autoridades del país norteamericano.
La crisis sanitaria internacional obligó a muchas parejas a posponer sus ceremonias de boda y así en Estados Unidos el número de uniones conyugales disminuyó casi un 17% entre 2020 y 2019, año en el que se celebraron unos 2 millones de matrimonios, informó el Centro Nacional de Estadísticas de Salud (NCHS).
Pero los románticos pueden tranquilizarse: a este descenso le seguirá una explosión en la cantidad de enlaces. Se espera que en 2022 se celebren casi 2,5 millones de casamientos, según estimaciones del Wedding Report, un grupo especializado en estadísticas sobre bodas.
La irrupción del covid-19 a Estados Unidos en marzo de 2020 desacomodó los planes de las parejas estadounidenses. Debido a las medidas sanitarias y las preocupaciones por la transmisión del virus en aglomeraciones de gente, muchos tuvieron que decidirse por la postergación de sus ceremonias.
El resultado es que la tasa de casamientos se desplomó ese año a un 5,1 por cada 1.000 personas, frente al índice de 6,1 del año anterior.
En total, 46 estados y la capital del país, Washington, registraron un descenso en la tasa de matrimonios en 2020, cayendo hasta un 44% en California y un 37,5% en Nueva York.
El estado de Nevada -en donde se encuentra Las Vegas, una ciudad turística conocida como la capital del juego por sus casinos y elegida por muchas parejas para casarse- también registró un descenso respecto a 2019, aunque siguió siendo el principal estado nupcial en 2020, al igual que en años anteriores.
Según Wedding Report, el número de bodas en 2021 debe mantenerse por debajo de los 2 millones, antes de la explosión esperada para 2022. El grupo estima que la situación se normalizaría a partir de 2023.