Las lluvias monzónicas en India y Bangladés causaron al menos 59 muertos y millones de personas se vieron afectadas por las inundaciones, informaron el sábado las autoridades.
Las inundaciones amenazan regularmente a millones de personas en Bangladés, un país de baja altitud. Sin embargo, los expertos afirman que el cambio climático está aumentando su frecuencia, su gravedad y su carácter repentino.
Gran parte del noreste del país está bajo el agua y se han desplegado tropas para evacuar a las personas aisladas.
Varias escuelas se convirtieron en refugios de emergencia para alojar a los habitantes de las aldeas que se inundaron en pocas horas.
“El viernes por la mañana toda la aldea estaba bajo el agua y todos estábamos aislados”, dijo Lokman, cuya familia vive en la aldea de Companyganj.
“Tras esperar todo el día en el tejado de nuestra casa, un vecino nos rescató con una barca improvisada. Mi madre dijo que nunca había visto una inundación así en su vida”, añadió este joven de 23 años.
– Dos días sin comer –
Asma Akter, otra mujer rescatada de las inundaciones, explicó que su familia no había comido desde hacía dos días.
“El agua subió tan rápido que no pudimos llevarnos ninguna de nuestras pertenencias”, dijo.
Desde el viernes, los rayos caídos durante las fuertes lluvias mataron al menos a 21 personas en Bangladés, indicaron a AFP responsables de la policía.
Entre ellos figuran tres niños de entre 12 y 14 años que perecieron en la ciudad de Nandail, informó el jefe de la policía local, Mizanur Rahman.
Otras cuatro personas murieron en deslizamientos de tierra provocados por las tormentas en la ciudad portuaria de Chittagong, dijeron oficiales de policía.
En la vecina India, al menos 16 personas fallecieron el jueves en el estado de Meghalaya (noreste) tras corrimientos de tierra y riadas que anegaron carreteras, informó en Twitter Conrad Sangma, primer ministro de este estado.
En el estado de Assam, más de 2,6 millones de personas se vieron afectadas por las inundaciones, tras cinco días seguidos de lluvias, indicó la agencia estatal de respuesta a las catástrofes.
Y desde el jueves, al menos 18 personas murieron por las inundaciones y los deslizamientos de tierra en todo el estado, informó la agencia. Casi 7.500 personas fueron rescatadas el sábado.
El primer ministro de este estado, Himanta Biswa Sarma, dijo a la prensa que había pedido a los responsables del distrito suministrar “toda la ayuda y los equipos de rescate necesarios” para las personas afectadas por las lluvias torrenciales.
En Bangladés, las inundaciones obligaron a cerrar el viernes el tercer aeropuerto internacional del país, situado en Sylhet, en el noreste.
Y la situación en la región se agravó el sábado por la mañana, tras un aumento de las precipitaciones el viernes por la tarde, declaró a la AFP Mosharraf Hossain, administrador jefe del gobierno de la región de Sylhet.
“La situación es mala. Más de cuatro millones de personas están bloqueadas por las inundaciones”, dijo, añadiendo que prácticamente toda la región estaba sin electricidad.
Según las previsiones meteorológicas, las inundaciones se agravarán en los próximos dos días en Bangladés y el noreste de India debido a las fuertes lluvias.