Autoridades mexicanas exhumaron los cuerpos de 31 personas en dos fosas clandestinas ubicadas en la localidad de Tlajomulco de Zúñiga, en el occidental estado mexicano de Jalisco, una región golpeada por la violencia ligada al crimen organizado, informaron autoridades este jueves.
“Llevamos 31 víctimas contabilizadas ya con el procesamiento que realiza el instituto (de ciencias forenses). Es un proceso un poco detallado y tenemos que esperar a que los cuerpos estén plenamente identificados”, dijo a la prensa el fiscal del estado, Luis Joaquín Méndez.
El funcionario detalló que las autoridades cuentan con elementos para poder identificar a la mitad de las personas exhumadas para poder entregar los cuerpos a sus familiares.
La primera fosa fue ubicada el pasado 1 de febrero en la localidad de San Isidro Mazatepec, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga, y tras varios días de trabajo en los que las autoridades comenzaron a extraer bolsas con cuerpos, se encontró el otro cementerio clandestino.
“Se está trabajando, se tuvo que dividir al personal porque se localizaron dos puntos (de inhumación)”, dijo el funcionario.
Jalisco, controlado por el poderoso Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), es uno de los estados más golpeados por la violencia ligada al crimen organizado.
En 2022 se encontraron en el estado 301 cadáveres en 41 fosas clandestinas, una cifra inferior a los 544 hallados en 2020 en 27 sitios de inhumación clandestina, la cifra más alta hasta la fecha.
De acuerdo con cifras oficiales, México registra más de 340.000 homicidios, la mayoría atribuidos a las organizaciones criminales, desde el lanzamiento de una polémica ofensiva militar antidrogas en diciembre de 2006.