Unos 25 miembros de la fuerza internacional para Kosovo (KFOR), liderada por la OTAN, resultaron heridos este lunes en enfrentamientos en el norte de Kosovo, donde manifestantes serbios exigen la destitución de alcaldes albaneses, anunció la KFOR en un comunicado.
Varios soldados de los contingentes italiano y húngaro de la KFOR “fueron objeto de ataques no provocados y sufrieron heridas con fracturas y quemaduras por la explosión de artefactos incendiarios” mientras “contenían a las franjas más activas de la multitud”, indicó la fuerza multinacional en un comunicado.
La OTAN condenó “enérgicamente” los “inaceptables” ataques contra las tropas de la KFOR, así como la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien pidió en un comunicado que “todas las partes den un paso atrás para rebajar las tensiones”.
La policía kosovar dispersó este lunes con gases lacrimógenos a manifestantes serbios que exigían la retirada del norte de Kosovo, donde son mayoría, de los alcaldes albaneses que acaban de tomar posesión.
Estos alcaldes, a los que los manifestantes no consideran como representantes legítimos, fueron nombrados tras las elecciones locales organizadas por las autoridades kosovares el 23 de abril en municipios mayoritariamente poblados por serbios, que boicotearon ampliamente el escrutinio: sólo participaron unos 1.500 votantes de los cerca de 45.000 censados.
Por la mañana, los serbios, que exigen también la salida de las fuerzas de seguridad especialmente desplegadas en la región desde hace varios días, se concentraron ante un ayuntamiento e intentaron entrar.
La policía les repelió utilizando gases lacrimógenos, según un periodista de AFP.
La policía dijo que se habían producido manifestaciones frente a tres ayuntamientos del norte de Kosovo, donde viven muchos serbios que se han mantenido leales a Belgrado y rechazan la independencia proclamada en 2008 de Kosovo, antigua provincia de Serbia.