Zico, una de las grandes leyendas brasileñas, cree que el fútbol de su país debe “reformular su pensamiento” después de que la selección no pasara de cuartos en el Mundial de Catar y el Flamengo fuera eliminado en semifinales del Mundial de Clubes
A sus casi 70 años, el ‘Pelé Blanco’ disfruta cada momento que pasa en un campo. “Estoy aquí para divertirme, he pasado un día muy feliz”, señala a los periodistas en el pequeño estadio Príncipe Moulay Hassan de Rabat.
Hace 20 minutos que finalizó el partido de las leyendas de la FIFA contra glorias deportivas de Marruecos en la víspera de la final del Mundial de Clubes. Siendo el más veterano de su equipo, la estrella brasileña de los 80 dejó algún recordatorio de su clase en forma de control o pase de primeras.
– Bendice a Ancelotti –
Junto a Zico, sus compatriotas Roberto Carlos y Savio, o los campeones del mundo con Francia en 1998 Youri Djorkaeff y Christian Karembeu.
Enfrente, el antiguo capitán de los Leones del Atlas Noureddine Naybet, la leyenda del medio fondo Hicham El Guerrouj y como refuerzo especial el presidente de la FIFA Gianni Infantino, que marcó el gol del triunfo local.
La antigua gloria del Flamengo hace un repaso de los principales temas futbolísticos, empezando por la situación de su compatriota Vinicius, víctima de ataques racistas en España.
“Es una falta de respeto muy grande hacia una persona, no se pueden permitir estas cosas. Hay que respetar a los jugadores en el campo, con Vinicius y con cualquier persona”, dijo.
Zico también se refirió a Carlo Ancelotti, que unas horas antes despachó los rumores sobre su llegada a la selección brasileña recordando que tiene contrato con el Real Madrid hasta 2024.
“Me gusta, creo que el entrenador de la selección brasileña debe ser alguien que no genere polémica. Ancelotti es alguien que ama el fútbol brasileño, conoce bien a los jugadores del país, y es uno de los técnicos más ganadores que existen, así que solo puedo aplaudir si se toma esa decisión”, dijo.
Zico ha vivido en Marruecos la decepción del Flamengo, eliminado en semifinales por el Al Hilal saudí (3-2), que desafiará en la final al Real Madrid el sábado.
El antiguo astro de la Seleçao, con la que firmó 48 goles en 71 partidos, hizo una reflexión más amplia sobre el fútbol de su país.
“Creo que Brasil necesita reformularse en términos de pensamiento si quiere volver a comandar el fútbol mundial. No es solo una cuestión de clubes, también de selección”, dijo.
Tras 15 minutos de charla, Zico era el único exjugador que quedaba en el campo. Desde la grada coreaba su nombre una heterogénea multitud, formada por los hinchas del Flamengo que han cruzado el Atlántico para seguir a su equipo y adolescentes marroquíes, a los que les quedaba mucho para nacer cuando Zico dejó el fútbol ya cuarentón en 1994.
– Firma multitudinaria de autógrafos –
Agradecido, el mito se acercó y tuvo la paciencia de firmar todas las camisetas del Flamengo que le tiraban, pero también las zapatillas o prendas que portaban los chicos locales.
Cuando los periodistas locales preguntan a Zico por la organización del torneo, expuso el problema que han tenido los miles de hinchas de su club después de que la FIFA cambiara el jueves la sede del duelo por el tercer puesto que disputarán Flamengo y Al Ahly.
Previsto en un primer momento en Rabat, como prolegómeno de la final, finalmente se jugará en Tánger.
“Ha habido muchas quejas por esto, un cambio de sede dificulta todo para los hinchas. De resto yo creo que todo bien”, dijo.
Casi a la misma hora que el partido de leyendas, la FIFA había anunciado que Leo Messi, Kylian Mbappé y Karim Benzema eran los finalistas del premio The Best: “Por el Mundial elegiría a Messi, es el campeonato más importante”.