BASILEA, Suiza. – A sus 55 años, Sarina Wiegman volvió a escribir historia este domingo al conquistar su tercera Eurocopa consecutiva, guiando a Inglaterra a la gloria tras vencer a España en penales (1-1, 3-1).
Con una serenidad que la caracteriza, la neerlandesa se consolida como una de las entrenadoras más exitosas del fútbol mundial.
La final en Basilea marcó su quinta aparición consecutiva en torneos mayores, incluyendo la Euro 2017 y el Mundial 2019 con Países Bajos, y la Euro 2022, Mundial 2023 y Euro 2025 con Inglaterra. De esas cinco finales, ha ganado tres títulos continentales, superando en logros a figuras como Vicente del Bosque y Didier Deschamps.
Nacida en La Haya, Wiegman combinó su carrera como futbolista (99 partidos internacionales) con estudios en Educación Física.

En 2014 inició su camino como seleccionadora adjunta de Países Bajos, y en 2017 asumió el mando principal, logrando el título europeo ese mismo año. Desde 2021 dirige a Inglaterra, donde ha replicado su éxito con una filosofía clara: cada jugadora conoce su rol.
Sin embargo, su liderazgo ha evolucionado. Según Keira Walsh, Wiegman se ha vuelto más cercana y expresiva: “Ahora se la ve bailar y cantar, eso ha cambiado”. Leah Williamson, capitana inglesa, destacó su apertura a las “conversaciones difíciles”, fomentando un ambiente de confianza y honestidad.
Durante el torneo, su calma en la zona técnica contrastó con momentos de euforia, como los goles agónicos ante Suecia y la remontada frente a Italia. Beth Mead lo resume así: “Sarina nos ha enseñado a apoyarnos mutuamente. Ella nos respalda, y nosotras la respaldamos”.
Con contrato hasta el Mundial 2027, Wiegman apunta ahora al único título que le falta: el campeonato mundial. Pero hoy, su legado europeo ya es eterno.