Tras el empate sin goles frente a Haití en el arranque del Grupo C de la fase final de las eliminatorias mundialistas, el técnico de la Selección Nacional de Honduras, Reinaldo Rueda, ofreció sus valoraciones sobre el resultado y destacó la importancia de sumar un punto como visitante ante un rival que, según sus palabras, “no es nada fácil”.
El encuentro, disputado en el Stade Sylvio Cator de Puerto Príncipe, dejó sensaciones encontradas entre la afición catracha, que esperaba un triunfo para iniciar con pie firme el camino hacia la Copa del Mundo 2026. Sin embargo, Rueda se mostró sereno y defendió el desempeño de sus dirigidos, subrayando que “ya no hay rivales sencillos en esta etapa de la competencia”.
“Por cuestión física, disposición o mentalidad no fallamos. Hubo imprecisión en los pases, pero el problema fue colectivo. Iniciamos con un 4-4-2 para estudiar al rival y luego pasamos a un 4-3-3. Romell no está habituado a esa posición, y Luis Palma tuvo que adaptarse. A veces abandonábamos la zona derecha”, explicó el estratega colombiano en conferencia de prensa.

El técnico también hizo énfasis en el contexto del partido: Haití, que ha mostrado crecimiento futbolístico en los últimos años, venía de una racha positiva como local y cuenta con jugadores que militan en ligas europeas y norteamericanas. Además, las condiciones climáticas y el estado del terreno de juego representaron un desafío adicional para la escuadra hondureña.
Con este resultado, Honduras suma su primer punto en el grupo, donde también compiten Cuba y Surinam. El próximo compromiso será en casa, donde se espera una mejor propuesta ofensiva y ajustes tácticos que permitan a la Bicolor sumar de tres.
Rueda concluyó su intervención reiterando su confianza en el grupo y llamando a la afición a mantener el apoyo: “Esto apenas comienza, y vamos a luchar cada partido como una final”.