SEATTLE, Estados Unidos. – En un brillante debut en el Mundial de Clubes, River Plate derrotó 3-1 al modesto Urawa Red Diamonds este martes en un partido disputado en la ciudad de Seattle, correspondiente al Grupo E.
El conjunto argentino, dirigido por Marcelo Gallardo, aprovechó la ingeniosa estrategia en los balones aéreos para imponerse con autoridad y clasificar con buen ritmo en el torneo mundial.
El encuentro, pese al marcador favorable, no fue tan claro como indica el resultado. El Millonario empezó agresivo, presionando desde el primer minuto y recuperando rápidamente la pelota en el medio campo para dominar la iniciativa.
Desde el inicio, ejercieron un fuerte control en el juego, que dificultó la salida del equipo japonés, que no lograba enlazar varias jugadas consecutivas por la intensidad de la presión argentina.

El gol de apertura llegó a los 12 minutos con una precisa jugada de cabeza de Facundo Colidio, tras un centro medido del lateral Marcos Acuña. Este tanto premió la ofensiva constante de River, que continuó dominando y buscando ampliar la ventaja, especialmente por la banda derecha con Franco Mastantuono, quien generó varias acciones peligrosas.
Diez minutos después, en el minuto 48, Sebastián Driussi anotó el segundo tras un disparo cruzado que dejó sin chances al arquero japonés. Pero la reacción del Urawa no tardó en llegar, y en el minuto 58, Yusuke Matsuo convirtió un penalti para reducir la diferencia.
El equipo argentino mantuvo el control y aseguró la victoria con un tercer gol de Maximiliano Meza en el minuto 73, consolidando así su dominio en el encuentro. Aunque el Urawa intentó reaccionar, no consiguió concretar sus ocasiones y se quedó corto en su intento de sorprender a River.

Tras la victoria, el técnico Marcelo Gallardo expresó su satisfacción: “Estoy contento con el rendimiento del equipo. Había nerviosismo, pero era fundamental comenzar sumando tres puntos y seguir mejorando en lo que viene”.
Este resultado coloca a River Plate en una buena posición para avanzar en un torneo que promete emociones y buen fútbol en Estados Unidos.