Los clubes de la Premier League inglesa han pulverizado récords en el reciente mercado de fichajes, alcanzando un gasto estratosférico de 3.000 millones de libras esterlinas (aproximadamente 4.000 millones de dólares).
Este dato, revelado por un informe de la consultora Deloitte publicado tras el cierre del mercado, supera en 650 millones de libras la marca histórica precedente, consolidando la supremacía financiera de la liga inglesa.
Esta inversión sin precedentes representa un 51% del gasto total en fichajes durante el verano boreal de 2025 entre las cinco grandes ligas europeas (Inglaterra, España, Francia, Alemania e Italia). Este porcentaje excede en cinco puntos la media de la participación de la Premier League en los gastos de fichajes en comparación con sus homólogas continentales durante los últimos cinco años.
El saldo neto de gastos de la Premier League, una vez descontados los ingresos por ventas de jugadores, se situó en unos asombrosos 1.200 millones de libras (1.600 millones de dólares), más del doble de los 570 millones de libras registrados en 2024. Esta cifra también supera el récord anterior de 1.100 millones de libras establecido en el verano de 2022.
Un dato particularmente llamativo es el aumento de casi 100 millones de libras en el gasto del Championship, la segunda división inglesa. Los clubes de esta liga invirtieron un total de 240 millones de libras (321 millones de dólares) en el reciente mercado estival, demostrando una ambición creciente por ascender a la Premier League y acceder a sus lucrativas recompensas financieras.
En contraste con el derroche inglés, las otras cuatro grandes ligas europeas registraron, en conjunto, más ingresos que gastos, con un saldo positivo de 90 millones de euros (105 millones de dólares). LaLiga española lideró con un saldo positivo de 40 millones de euros, seguida por la Serie A italiana (90 millones), la Bundesliga alemana (180 millones) y la Ligue 1 francesa (305 millones).
Tim Bridge, de Deloitte, interpreta este gasto récord como una señal clara de que, “a pesar del gasto moderado en el resto del continente, los clubes [ingleses] no tienen planes de reducir sus inversiones en el producto del campo de juego”. Con un número récord de equipos ingleses compitiendo en competiciones europeas, Bridge argumenta que los clubes de la Premier League buscan atraer al mejor talento y consolidar aún más la liga como la más competitiva del mundo.