Los New York Knicks aplastaron 119-81 a los Boston Celtics, los campeones vigentes de la NBA, y finiquitaron esta semifinal de la Conferencia Este por un marcador global de 4-2.
El equipo liderado por Jalen Brunson (23 puntos) y Karl-Anthony Towns (21) jugará su primera final de conferencia desde 2000 frente a los Indiana Pacers.
Los Celtics quedaron completamente desdibujados sin su estrella, el lesionado Jayson Tatum, y fueron humillados con desventajas de hasta 41 puntos.

Jaylen Brown, la otra figura de Boston, fue el único que plantó cara con 20 puntos pero, con el duelo ya decantado para los locales, se retiró al banco por una temprana expulsión por personales al final del tercer cuarto.
Los Knicks le regalaron una noche mágica a sus aficionados del Madison Square Garden, acabando con una travesía del desierto de un cuarto de siglo hasta volver a una final de conferencia, la tercera mayor sequía entre los equipos de la NBA.
Una colección de celebridades celebró el triunfo desde la primera fila, como los cantantes Lenny Kravitz y Bad Bunny y los actores Timothée Chalamet y Ben Stiller.

Con la salida de Boston han caído los dos primeros sembrados del Este. El líder de la conferencia, Cleveland Cavaliers, sucumbió ante los Pacers por 4-1.
El Oeste también podría tener dos finalistas inesperados. Minnesota Timberwolves, sexto cabeza de serie, ya está clasificado y espera rival del séptimo y definitivo partido del domingo entre Oklahoma City Thunder, primer sembrado, y Denver Nuggets, cuarto.