El Inter de Milán, finalista de la última Liga de Campeones de Europa, enfrenta una situación crítica en el Mundial de Clubes 2025.
Tras un empate 1-1 frente a Monterrey en su estreno en el Grupo E, el equipo italiano necesita ganar este sábado al Urawa Reds en el estadio Lumen Field, en Seattle, para evitar una temprana eliminación.
El empate en Pasadena deja a los nerazzurri sin margen de error. Si sufren una derrota ante el conjunto japonés, estarían virtualmente fuera de la competencia, con solo una fecha restante para la tercera y última jornada.
En cambio, una victoria les daría la posibilidad de controlar su destino en la fase de grupos, enfrentándose en la siguiente fecha a River Plate en Seattle, club que ya venció a Urawa Reds en su primer partido.
El entrenador del Inter, Cristian Chivu, expresó su respeto hacia el adversario, pero afirmó que su equipo está preparado para más. “Sabemos que el fútbol no está predestinado; tenemos que luchar más que nuestro rival y estamos dispuestos a hacerlo”, declaró el exinternacional rumano, quien asumió la dirección del equipo en junio tras la salida de Simone Inzaghi, actualmente en el Al Hilal saudí.
El peso ofensivo del equipo depende en gran medida de Lautaro Martínez, quien ya marcó en el torneo y continúa siendo clave en la búsqueda del título mundial.
La prensa italiana también alertó sobre el posible debut del joven Francesco Pio Esposito, de 19 años, que viene de una buena temporada en Spezia, donde anotó 19 goles en 39 partidos en la Serie B, aunque en este torneo estuvo ausente por molestias en la rodilla.
Por su parte, Urawa Reds llega al encuentro tras caer 3-1 ante River Plate y necesita ganar para mantener vivas sus esperanzas en la competencia. “Es importante cambiar de ritmo y recuperarnos”, afirmó Yusuke Matsuo, autor del único gol japonés en el torneo hasta ahora.