Gennaro Gattuso fue presentado este jueves como nuevo seleccionador de Italia, y durante su intervención en Roma expresó su confianza en llevar a la Nazionale al Mundial 2026, pese a un inicio complicado en las clasificatorias europeas. “Creo que tenemos buenos jugadores. Cuatro o cinco de ellos están en el ‘Top 10’ mundial en sus posiciones”, afirmó Gattuso, quien reemplaza a Luciano Spalletti, despedido tras la derrota 3-0 contra Noruega en el primer partido de las eliminatorias.
El técnico, de 47 años y exjugador internacional con 73 partidos con la selección italiana, resaltó que su enfoque está en el equipo, no en los individualidades. “Tenemos un buen equipo, y estoy convencido de que con calidad podemos lograr nuestro objetivo de clasificarnos para el Mundial”, aseguró. Tras dos partidos en la fase clasificatoria, Italia ocupa la tercera posición en su grupo, con solo tres puntos, a nueve de Noruega, que ha disputado dos encuentros más.
Gattuso enfatizó su plan para revitalizar a la selección: “Entusiasmo, ganas, voluntad de estar unidos y luchar juntos”. El líder del grupo clasificará automáticamente al Mundial en Estados Unidos, Canadá y México, mientras que el segundo deberá pasar por el repechaje, una fase que en 2018 y 2022 dejó fuera a Italia.
El entrenador también subrayó la importancia de crear un vínculo cercano con sus jugadores: “Conmigo, en el entrenamiento, tienen que ir a mil por hora”, y añadió que busca devolverle a Italia la mentalidad que la convirtió en una potencia mundial en el fútbol. Para ello, Gattuso prioriza la salud mental y emocional, señalando que la táctica y técnica no son todo, sino que hay que saber poner a los jugadores en la mejor situación para rendir.
Aunque no fue la primera opción de la FIGC, que rechazó a Claudio Ranieri, el presidente Gabriele Gravina justificó el nombramiento como “una elección del corazón y la convicción”. Gattuso, campeón del mundo en 2006 y con un palmarés de jugador destacado, ha entrenado en clubes como Milan, Valencia y Marsella, con resultados dispares, pero ahora se apuesta a su carácter y motivación para devolver a Italia a la élite mundial.