SAN SALVADOR. – La Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) impuso una sanción económica y disciplinaria a la Federación Salvadoreña de Fútbol (Fesfut), tras los insultos racistas proferidos por aficionados locales contra jugadores de Surinam durante el partido clasificatorio al Mundial 2026, disputado el pasado 8 de septiembre en el estadio Cuscatlán.
El encuentro, correspondiente a la segunda fecha de la ronda final de la Concacaf, terminó con victoria 2-1 para Surinam.
Sin embargo, el resultado quedó opacado por los actos discriminatorios denunciados por el entrenador Stanley Menzo y el defensor Shaquille Pinas, quienes afirmaron que fueron llamados “negros” y “monos” por parte del público salvadoreño.
En respuesta, la FIFA notificó a Fesfut la imposición de una multa de 62,715 dólares, que deberá ser destinada a un plan integral contra la discriminación, supervisado por el organismo internacional.
Además, se ordenó el cierre de al menos el 15% del aforo del estadio Cuscatlán para el próximo partido oficial como local, afectando principalmente las gradas detrás de las porterías.
La medida se enmarca en el reglamento disciplinario de la FIFA, que endureció sus sanciones contra actos de racismo desde 2020, en línea con campañas globales como “Say No to Racism” y “Football Unites the World”.
Fesfut emitió un comunicado en el que lamenta los hechos y se compromete a implementar acciones educativas y preventivas en coordinación con clubes, barras organizadas y autoridades deportivas. “Rechazamos todo acto de discriminación y trabajaremos para erradicar estas conductas de nuestros estadios”, señaló la federación.
Organismos como la Concacaf y la Asociación de Futbolistas Profesionales de El Salvador (AFES) también condenaron el incidente y pidieron mayor vigilancia en eventos deportivos.
La próxima fecha clasificatoria se jugará en noviembre, y El Salvador deberá cumplir con las restricciones impuestas mientras enfrenta presión por mejorar su imagen internacional.