El Manchester United se vio sorprendido por el Galatasaray turco 3-2 al término de un partido plagado de alternativas, este martes en Old Trafford, en la segunda fecha de la fase de grupos de la Liga de Campeones.
Tras perder en su estreno en Múnich con el Bayern (4-3), los Diablos Rojos estuvieron en dos ocasiones por delante en el marcador tras los goles del prodigio danés Rasmus Hojlund (17, 67), pero vivieron un final de partido de pesadilla: Wilfried Zaha (23), Kerem Akturkoglu (71) y el argentino Mauro Icardi (81) marcaron para el conjunto de Estambul.
Poco antes del gol del exjugador del París SG, el brasileño Casemiro cometió un penal que le costó la expulsión. Aunque Icardi envió el balón fuera desde los once metros. Un fallo del que se rehízo poco después al superar al arquero local André Onana con un balón picado.
El equipo dirigido por el neerlandés Erik ten Hag, décimo en el campeonato inglés, es colista del grupo A en la competición continental, sin estrenar su casillero de puntos tras dos jornadas. En una llave en la que el líder Bayern Múnich marca el ritmo (6 puntos), el partido a domicilio contra los turcos era de vital importancia en las aspiraciones del conjunto inglés para alcanzar los octavos de final.
Tras esta derrota, los Diablos Rojos están a cuatro puntos del Galatasaray, segundo. En la tercera fecha de Champions recibirán al Copenhague, antiguo club de Hojlund, cuyos dos goles son una de las escasas noticias positivas para un United en crisis de resultados.
“Es una gran decepción. El vestuario estaba en silencio. No creo que sea un problema de confianza, es más una falta de acierto, de malas decisiones en los momentos clave y un poco de mala suerte”, declaró el centrocampista ofensivo Christian Eriksen.