El Al Hilal, respaldado por los vastos recursos del Fondo Soberano saudí y dirigido por el exentrenador del Inter, Simone Inzaghi, se presenta como un contendiente formidable en el Mundial de Clubes.
Tras eliminar al Manchester City en un electrizante 4-3, el club saudí buscará un lugar en semifinales ante el Fluminense.
Como uno de los equipos más prestigiosos de Arabia Saudita, Al Hilal es gestionado directamente por el Fondo Soberano de Inversión, el cual también financia el torneo y posee derechos de transmisión mediante DAZN. Liderado por el príncipe heredero Mohamed bin Salmán, el fondo ha invertido considerablemente en el deporte como parte de su estrategia de diversificación económica, reflejando la creciente influencia saudí en el fútbol internacional, especialmente tras la designación del país como sede del Mundial 2034.

El equipo cuenta con una sólida legión extranjera. Tras la breve etapa de Neymar, la plantilla incluye talentos como Marcos Leonardo y Malcom, goleadores brasileños; Renan Lodi, lateral izquierdo con pasado en Europa; Kalidou Koulibaly, central senegalés ex Napoli; y Yassine Bounou, destacado arquero marroquí. También figuran los portugueses João Cancelo y Rubén Neves, junto a los serbios Milinkovic-Savic y Mitrovic, aunque este último está lesionado.
En el plano local, destaca Salem Al-Dawsari, héroe en la victoria saudí sobre Argentina en Catar 2022, quien brilló en partidos recientes antes de lesionarse. La mezcla de figuras experimentadas con talento nacional refuerza la ambición del club.
Simone Inzaghi, tras su polémica salida del Inter tras una derrota en la Champions, asumió el reto en Arabia con un contrato de 26 millones anuales. En poco tiempo, ha logrado impregnar a su equipo un estilo vertical, intenso y veloz, reminiscente de su etapa en Italia. Su presencia apasionada en el banquillo es otro de los sellos del renovado Al Hilal.