Ángel Di María, que marcó un gol en su debut en la Serie A, y Dusan Vlahovic, autor de un doblete, lanzaron a la perfección a la Juventus contra el Sassuolo (3-0), en la clausura de una primera fecha marcada también por la demostración del Nápoles en Verona ante el Hellas (5-2).
El ‘gran ocho’ de la Serie A llega con las pilas cargadas: desde el campeón AC Milan al Atalanta, los ocho primeros de la pasada temporada comenzaron con victoria el nuevo curso.
Esta prolífica primera fecha (34 goles) se vio salpicada por algunos gritos racistas hacia el delantero nigeriano del Nápoles Victor Osimhen en Verona.
– La Juve ha vuelto –
Los tifosi de la Juve, más bien intranquilos desde la goleada recibida ante el Atlético de Madrid de Morata (4-0) en el último amistoso pudieron respirar: la Juve está preparada y sus delanteros también.
Ángel Di María y Dusan Vlahovic lanzaron a la perfección a la Juventus ante el Sassuolo (3-0), este lunes en el partido que bajó el telón de la primera fecha del campeonato italiano.
El argentino, llegado este verano boreal a la Juventus procedente del París SG, se presentó ante el público turinés con un gol de volea. A centro desde la izquierda del lateral brasileño Alex Sandro, Di María empalmó de primeras con la zurda desde dentro del área para batir al arquero Andrea Consigli (26) en el gol que supuso la apertura del marcador por parte de la Juve.
Después, el serbio, que no se mostró en gran forma en la pretemporada, recuperó su olfato de gol para marcar un penal que él mismo provocó (43) y sentenciar a pase del propio Di María (51). Se unió así al frente de la clasificación de goleadores a Ante Rebic (AC Milan), el otro jugador en haber firmado un doblete este fin de semana.
El Sassuolo también hizo méritos, con una mayor posesión de balón y varios acercamientos peligrosos al arco defendido por Mattia Perin, titular ante la ausencia del lesionado Wojciech Szczesny.
Pero esta Juve se mostró demasiado fuerte, bien decidida a evitar el inicio fallido del curso pasado que le impidió pelear por el título.
La única preocupación para Massimiliano Allegri: la retirada renqueante de Di María (66), visiblemente tocado en el muslo izquierdo.
El técnico bianconero no se mostró sin embargo demasiado preocupado: “Ya tuvo un pequeño problema en el aductor hace una semana, veremos mañana (martes) el resultado de los exámenes”, afirmó para DAZN.
“Lo importante era ganar y recuperar un poco de entusiasmo”, añadió.
– Nápoles espectacular –
El Nápoles, obligado a reinventarse sin Koulibaly, Insigne ni Mertens, ganó y dio espectáculo en la cancha del Hellas Verona (5-2) en un partido marcado por los gritos racistas hacia Victor Osimhen.
El delantero nigeriano del Nápoles fue, al igual que la temporada pasada en el mismo estadio, objeto de gritos racistas procedentes de la curva de los ultras locales, durante el primer tiempo, según constató un fotógrafo de la AFP.
Pero eso no desestabilizó a Osimhen y al Nápoles, que descubrió un reemplazo de garantías en el costado izquierdo huérfano de Lorenzo Insigne con Khvicha Kvaratskhelia: el joven georgiano (21 años) también marcó y ofreció un gol.
El Hellas Verona, recientemente eliminado de la ‘Coppa’ de Italia ante el Bari, de la Serie B, se adelantó por medio de Kevin Lasagna (29) y logró igualar al inicio del segundo tiempo (Thomas Henry, 48).
Pero el Nápoles impuso su jerarquía con un gol de cabeza de Kvaratskhelia (37) y un remate de Osimhen (45+3) a la salida de un córner desde el segundo palo.
Y el conjunto del sur de Italia se escapó en el segundo acto gracias al polaco Piotr Zielinski (55), al eslovaco Stanislav Lobotka (65) y a Matteo Politano (79).
El partido estuvo precedido de un minuto de silencio en memoria del antiguo arquero Claudio Garella, campeón de Italia con los dos equipos en los años 1980.
“Es importante comenzar bien, porque perdimos a jugadores clave, verdaderos líderes”, declaró Osimhen.