Los Boston Celtics lograron una valiosa victoria en el TD Garden al imponerse 103-95 sobre los Indiana Pacers, resultado que les permite mantenerse en la tercera posición de la Conferencia Este de la NBA y reforzar sus aspiraciones de cara a la segunda mitad de la temporada.
Con este triunfo, el conjunto dirigido por Joe Mazzulla mejoró su registro a 18 victorias y 11 derrotas, confirmando su buen momento en casa y enviando un mensaje de solidez a sus rivales directos.
El gran protagonista de la noche fue el ala-pívot Jaylen Brown, quien firmó una actuación estelar con 31 puntos y nueve rebotes en 33 minutos de juego. Su energía ofensiva y capacidad para atacar el aro resultaron determinantes en un partido que se mantuvo parejo hasta el último cuarto. Jayson Tatum, aunque menos brillante en la anotación, aportó 22 puntos y siete asistencias, mostrando liderazgo en los momentos clave.

Por parte de los Pacers, Tyrese Haliburton fue el máximo anotador con 27 puntos y 10 asistencias, pero no pudo evitar que su equipo sumara su decimotercera derrota de la campaña. Indiana, que ahora registra 15-13, se mantiene en la zona media de la clasificación y deberá ajustar su defensa si quiere escalar posiciones.
La victoria de Boston cobra mayor relevancia considerando el panorama en la Conferencia Este. Los Detroit Pistons lideran con marca de 22-6, seguidos por los New York Knicks con 20-8. Los Celtics, terceros, buscan acercarse a la cima y aprovechar cualquier tropiezo de sus rivales. Además, el equipo verde ha mostrado una notable mejoría en su defensa, limitando a los Pacers a solo 95 puntos, muy por debajo de su promedio ofensivo.
El ambiente en el TD Garden fue electrizante, con la afición alentando cada jugada y celebrando la intensidad defensiva que caracteriza al equipo. Con este triunfo, Boston reafirma su condición de candidato y se prepara para una exigente gira de partidos fuera de casa que pondrá a prueba su consistencia.