En una jornada clave para la transición gubernamental, la presidenta Xiomara Castro encabezó el pasado 20 de diciembre una reunión del Gabinete de Gobierno Ampliado en Lepaguare, Olancho, donde se presentaron más de 100 informes institucionales sobre los avances alcanzados durante su administración.
El encuentro, que reunió a ministros, gerentes y directores de instituciones estatales, sirvió como plataforma para evaluar el cierre de gestión y proyectar el legado del llamado “socialismo democrático”.
Entre los logros destacados, el gobierno informó que la tasa de homicidios se redujo a la mitad y que la pobreza disminuyó en un 15%, cifras que fueron atribuidas a la implementación de políticas de seguridad, programas sociales y recuperación institucional.
Fausto Cálix, titular de Aduanas, subrayó el rescate de entidades clave como la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) y Banadesa, mientras que la ministra de la Presidencia, Sarahi Cerna, confirmó que cada dependencia presentó sus resultados ante el pleno.

Durante la sesión, se aprobó la extensión del Estado de Excepción hasta el 26 de enero de 2026, último día del mandato de Castro.
Esta medida, que ha sido objeto de controversia en el Congreso Nacional, busca mantener el control sobre zonas afectadas por el crimen organizado y garantizar la estabilidad en medio de la incertidumbre postelectoral.
La presidenta instruyó a su equipo a preparar el “cierre de año y cierre de gobierno”, en lo que se perfila como una transición marcada por la rendición de cuentas y la consolidación de reformas estructurales.
Aunque algunos sectores han cuestionado la legalidad de extender el Estado de Excepción sin aprobación legislativa, el Ejecutivo sostiene que la medida es necesaria para proteger los avances alcanzados. Con esta reunión, el gobierno de Castro busca cerrar su ciclo con una narrativa de logros y estabilidad, en un contexto político tenso donde la transparencia y la institucionalidad serán claves para el próximo periodo.