FRANCISCO MORAZÁN. — La madrugada del domingo, Honduras despertó con una noticia desgarradora: Arnold Neptaly Gómez, un niño de apenas siete años, fue encontrado sin vida dentro de una fábrica de bolsas en la aldea El Tablón, Distrito Central.
El menor había sido reportado como desaparecido horas antes, tras ser visto por última vez caminando junto a un hombre hacia una bodega solitaria del sector.
Según informes preliminares de la Policía Nacional, el niño fue engañado con una malteada por su raptor, quien lo condujo hasta el lugar donde presuntamente otras personas también participaron en el crimen.
Cámaras de videovigilancia captaron los últimos momentos de vida de Arnold, alrededor de las 6:00 p.m. del sábado, cuando se le observa siguiendo a un hombre a cierta distancia.
El cuerpo del menor fue hallado dentro de una bolsa plástica, lo que ha generado una ola de indignación y dolor en la comunidad.

La madre del niño, Yamileth Velásquez, relató entre lágrimas que su hijo fue víctima de un engaño cruel.
“Solo por una malteada lo llevaron ahí”, expresó.
Las autoridades iniciaron una investigación exhaustiva. El principal sospechoso, captado en video, está siendo interroga, como a otras personas que se encontraban en la fábrica al momento del crimen.
Organizaciones de derechos humanos y colectivos ciudadanos han exigido justicia inmediata y mayor protección para la niñez hondureña.
El caso ha reavivado el debate sobre la seguridad en zonas rurales y la necesidad de fortalecer los mecanismos de prevención y respuesta ante delitos contra menores.