La presidenta Tsai Ing-wen condenó los ejercicios militares chinos alrededor de la isla de Taiwán después de que China continental lanzó 11 misiles balísticos al mar, calificándolo como un acto de irresponsabilidad no solo ante Taiwán sino ante el resto del mundo.
La mandataria afirmó que esto es especialmente peligroso para las rutas aéreas y marítimas civiles cercanas a Taiwán y añadió que no solo afecta la estabilidad del Estrecho sino que también viola la soberanía de Taiwán y aumenta la tensión en el Indo-Pacífico. Pidió a las autoridades chinas que actúen con calma y cautela.
Tsai, hizo un llamado a la comunidad internacional para que apoye al Taiwán democrático y se una, para poner fin a estas acciones militares unilaterales e irracionales. La mandataria agradeció a los países del G7 y a los buenos amigos en todo el mundo por apoyar la paz y la estabilidad en el Estrecho de Taiwán y la región.
El ejército nacional está preparado y atento, el gobierno está trabajando estrechamente con sus aliados para evitar un deterioro de la seguridad en la región, afirmó la presidenta.
Por su parte el Ministerio de Relaciones Exteriores (MOFA), emitió un comunicado condenando enérgicamente a China por lanzar múltiples misiles en aguas alrededor de Taiwán, amenazando la seguridad nacional de la nación, aumentando las tensiones regionales y afectando el tráfico y el comercio internacional.
El MOFA instó a la comunidad internacional a condenar la coerción militar de China hacia Taiwán e hizo un llamado a los países de todo el mundo para que continúen apoyando la democracia en la nación, a fin de salvaguardar conjuntamente los valores de libertad y democracia, mantener el orden internacional basado en reglas y garantizar un Indo-Pacífico libre y abierto.