El Manchester United sufrió su tercera derrota de la temporada al caer 3-1 en su visita al Brentford, en un duelo correspondiente a la sexta jornada de la Premier League.
El resultado agrava la crisis deportiva del conjunto de Old Trafford y pone en entredicho la continuidad del técnico portugués Rubem Amorim.
El partido, disputado en el Brentford Community Stadium, comenzó con intensidad. A los 8 minutos, Igor Thiago abrió el marcador tras un pase largo de Jordan Henderson que encontró a la defensa del United mal posicionada. El brasileño repitió al 20’, aprovechando un rebote tras una jugada a balón parado.
Benjamin Sesko descontó al 26 con su primer gol en Premier League, pero el United no logró capitalizar su reacción. La oportunidad más clara llegó al minuto 71, cuando Bruno Fernandes falló un penalti que pudo significar el empate.
En el tiempo añadido, Mathias Jensen sentenció el partido con un disparo potente que dejó sin opciones al arquero Altay Bayindir.
Amorim, que asumió el cargo en noviembre de 2024, no ha logrado encadenar dos victorias consecutivas en liga, a pesar de no disputar competiciones europeas. La victoria ante Chelsea (2-1) la semana anterior parecía un punto de inflexión, pero la derrota ante Brentford lo devuelve a la incertidumbre.
El técnico apostó por alinear por primera vez a sus tres fichajes ofensivos —Matheus Cunha, Mbeumo y Sesko— adquiridos por 200 millones de libras. Sin embargo, su esquema defensivo con solo tres zagueros (De Ligt, Maguire y Shaw) volvió a mostrar fisuras preocupantes.
Con apenas 7 puntos de 18 posibles, el United ocupa la 13ª posición provisional. La presión sobre Amorim crece, y en los pasillos de Old Trafford ya se especula con posibles reemplazos.