Un violento ataque con arma de fuego estremeció este miércoles un centro de detención de migrantes en Dallas, Texas, dejando un saldo de una persona fallecida, dos heridas y el presunto autor muerto por suicidio.
El incidente ocurrió en las inmediaciones de las oficinas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), cuando agentes federales trasladaban a un grupo de detenidos.
Según el jefe de la policía de Dallas, Daniel Comeaux, el agresor disparó desde la azotea de un edificio contiguo al complejo gubernamental. “Supimos que cuatro personas habían recibido tiros y que dos de ellas estaban muertas, incluido el tirador”, declaró Comeaux, sin precisar la identidad de las víctimas ni el motivo del ataque.
La policía local confirmó que el sospechoso abrió fuego contra el edificio del ICE desde una estructura adyacente, provocando el caos entre personal y detenidos. Dos personas fueron trasladadas al hospital con heridas de bala, mientras que otra víctima murió en el lugar. El atacante, cuya identidad aún no ha sido revelada, fue hallado sin vida en el edificio desde donde ejecutó el ataque, aparentemente por suicidio.
Testigos relataron escenas de pánico y confusión. “Escuchamos varios disparos seguidos y luego gritos. Los agentes corrieron a proteger a los migrantes”, dijo un empleado del centro que pidió anonimato.
Las autoridades federales y locales han iniciado una investigación conjunta para esclarecer los hechos. Se revisan cámaras de seguridad, registros de ingreso al edificio y posibles vínculos del agresor con grupos extremistas o antecedentes penales.
El ataque ha reavivado el debate sobre la seguridad en instalaciones migratorias y el acceso a armas de fuego en Estados Unidos. ICE informó que reforzará sus protocolos de protección en centros de detención a nivel nacional mientras se esclarecen los motivos del atentado.