Un sujeto señalado como el homicida de una joven manicurista fue capturado, durante una operación coordinada por la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) en la 33 calle de San Pedro Sula, zona norte de Honduras.
El sospechoso Walter Mauricio Alvarenga Monge (22), está ligado con el feminicidio agravado de Catherine Nicole Fuentes (22), quien fue reportada como desaparecida desde el pasado 20 de julio.
A través de la Unidad de Investigación de Desaparecidos y la Unidad de Investigación de Muerte Violenta de Mujeres, ayer se realizó la aprehensión.
Desde un inicio, investigaciones de la DPI señalaban a la expareja de Fuentes, Alvarenga Monge, como principal sospechoso.
De acuerdo al reporte policial, la muchacha fue vista por última vez el 20 de julio en la colonia Cerrito Lindo, sector Rivera Hernández, cuando avisó a su mejor amiga que tendría una cita romántica.
Desde esa noche, no se volvió a tener noticias de ella, por lo que familiares interpusieron la denuncia de desaparición.
La joven no respondía llamadas telefónicas y comenzó una búsqueda desesperada que incluyó la difusión de su fotografía en redes sociales y en su iglesia Torre Fuerte, donde era miembro activa.
El 26 de julio, los equipos de búsqueda localizaron en una zona boscosa de la aldea El Zapotal un cadáver calcinado en un 95 por ciento, confirmando que se trataba de Catherine Nicole Fuentes.
Según las investigaciones, el detenido habría privado de libertad a la joven, luego la asesinó y posteriormente la enterró en una fosa.
Tras semanas de investigación, entrevistas a familiares y amigos, así como análisis técnicos por parte de la DPI y la Interpol, se determinó que la joven había sido víctima de agresiones físicas y verbales por parte del sospechoso.
Gracias a las acciones de vigilancia, seguimiento y análisis criminal, la DPI logró ubicar y capturar al presunto responsable, quien ya ha sido remitido a la Fiscalía del Ministerio Público para enfrentar cargos por feminicidio agravado.
Este crimen ha generado indignación y alarma en la ciudad por la persistente ola de violencia contra las mujeres en Honduras.
La Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y la Unidad de Feminicidios aseguran contar con pruebas técnicas y testimoniales que lo incriminan directamente en el feminicidio.