Brasil y Uruguay empataron 1-1 en Salvador, en partido de clasificación para el Mundial de 2026 que dejó con mal sabor a la ‘verdeamarela’ y confirma que la Celeste superó el mal momento que atravesó tras la Copa América.
El resultado mantiene a Uruguay como segundo clasificado en el grupo sudamericano de clasificación para la Copa del Mundo, a cinco puntos del líder Argentina, mientras que Brasil cae a la quinta posición, a siete de la Albiceleste.
Jugando en casa y buscando una victoria que le permitiera superar a Uruguay en la tabla y situarse segundo, Brasil se hizo con el dominio desde el inicio, pero nuevamente mostró su falta de ideas en los últimos metros.
Los uruguayos volvieron a hacer gala de una sólida y ordenada defensa, ayudados además por el buen trabajo en la medular de Matías Ugarte, Federico Valverde y Rodrigo Bentancur, que no permitieron a los locales tener la fluidez de juego necesaria para crear peligro.
La mejor prueba de ello es que Brasil apenas logró rematar a portería por primera vez en el descuento de la primera mitad, con un cabezazo de Igor Jesús que Sergio Rochet, muy atento, atajó.
Con un Vinicius inoperante otra vez más por la izquierda, y cuando se puso por el medio, Brasil se aferró al desequilibrio del joven Savinho por la derecha, aunque el extremo del Manchester City tampoco tuvo su noche más brillante.
Por su parte, Uruguay, con jugadas bien combinadas y saliendo muy rápido a la contra, no se dejó intimidar y amenazó con jugadas por las bandas, aunque sin éxito a la hora de encontrar a su ariete Darwin Núñez dentro del área. En la segunda mitad, Brasil pareció salir con una marcha más para intentar abrir el marcador y dispuso de dos oportunidades en los primeros minutos, con rápidas arrancadas por velocidad de Savinho y Vinicius, aunque sus remates salieron rozando el palo.