La tenista española Paula Badosa, cuarta cabeza de serie, se despidió del torneo sobre hierba de Wimbledon derrotada en octavos de final por la rumana Simona Halep en lo que ella calificó como “un día para olvidar”.
Halep, de 30 años, 18ª de la clasificación WTA y campeona de Wimbledon en 2019, necesitó apenas una hora para imponerse por 6-1 y 6-2 a la catalana en la pista central del All England Club londinense.
“A nadie le gusta llegar a la segunda semana de un Grand Slam, jugar en la pista central y (…) estar solo una hora y no ser capaz de desplegar mi juego”, reconoció después Badosa, de 24 años, que en octubre levantó el trofeo de Indian Wells tras lo cual entró por primera vez en el Top 10.
Pese a sufrir en mayo una lesión muscular en el sóleo de la pierna derecha y haber llegado a Wimbledon sin ninguna victoria sobre hierba este año, la española se había mostrado firme en las primeras tres rondas.
Pero el lunes fue “un día para olvidar”, afirmó.
“Me voy con malas sensaciones” aunque “de las derrotas duras también hay cosas que aprender”, defendió, dispuesta a “seguir trabajando y seguir mejorando, que es el único camino”.
Halep ya la había vencido en el Mutua Madrid Open en mayo y esta vez la española dijo haber intentando “ser un poco más agresiva”. “Eso me ha hecho fallar un poco más”, agregó.
Lamentó haber estado menos certera de lo habitual pero, más que a un flaqueo de su “fortaleza mental”, que dijo no considerar como su “punto débil”, lo atribuyó a una falta de experiencia.
“Voy a intentar no venirme abajo”, afirmó, defendiendo que a su edad puede jugar 25 o 30 Grand Slam más, determinada a dar su “mejor versión”.
Llegar a la cuarta ronda de Wimbledon debería considerarse un paso positivo, aseguró.
Dijo “sentir mucho la exigencia de la gente”. Pero “no soy Rafa Nadal ni lo voy a ser”, afirmó, considerando que “nos hemos un poco mal acostumbrado en España” a los extraordinarios resultados del mallorquín.
– “Gran partido” de Halep –
En su primer Wimbledon, Badosa ya había caído el año pasado en octavos de final contra la checa Karolina Muchova.
Halep consideró haber jugado “un gran partido”. “Siempre es difícil jugar contra una gran jugadora”, afirmó la rumana, reconociendo que estaba “nerviosa al principio pero lo disfruté mucho”.
Halep demostró no haber perdido nada del genio que gastó en su última participación en el Grand Slam sobre hierba, cuando hace tres años levantó el trofeo imponiéndose a la estadounidense Serena Williams en una espectacular final.
Quebró el saque Badosa con un ángulo diabólico en el tercer juego del primer set y de nuevo en el quinto y el séptimo.
A la española le fallaron las piernas y el brazo, lanzando tozudamente las bolas fuera, y aunque intentó jugar más agresivo, no logró quebrarle el servicio de una Halep rápida y determinada.
La rumana, exnúmero 1 del mundo, no ha perdido un set desde que empezó esta edición de Wimbledon.
“Día a día estoy mejorando y espero con impaciencia el próximo partido para volver a dar lo mejor de mí misma”, aseguró la tenista que pasa así a cuartos de final de un Grand Slam por quinta vez en su carrera.
Ausente el año pasado, y tras la cancelación del torneo en 2020 debido a la pandemia, Halep afirmó haber echado “mucho de menos jugar en Wimbledon” y agregó que “siempre es un placer volver”.
En la próxima ronda, se enfrentará a la estadounidense Amanda Anisimova por un pase a semifinales.