El Botafogo se anotó el primero de los dos asaltos contra el Palmeiras tras ganarle en Río de Janeiro por 2-1, en la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores.
Tres goles en la primera mitad, obra de Luiz Henrique e Igor Jesús para el Botafogo, y de Mauricio para el partido, pusieron, fueron la carta de presentación del encuentro, cuyo segundo asalto será el miércoles que viene en Sao Paulo.
– DUELO DE FAVORITOS –
Se esperaba mucho del partido, el duelo estrella de estos octavos de final, con dos firmes candidatos al título, que no defraudaron las expectativas.
Jugando en casa, el Botafogo buscó llevar la iniciativa, ante un Palmeiras haciendo gala una vez más de su consistencia defensiva y sus rápidas transiciones en ataque, aunque echó en falta a su gran figura, el joven Estevao, inicialmente suplente.
De la mano de un incisivo Luiz Henrique, el Botafogo creó la primera gran ocasión en el minuto 6, cuando el joven extremo recibió un balón en largo y se fue por velocidad de Murilo.
Al entrar en el área palmeirense, con toda la portería a favor, erró por poco su disparo.
En el 22 pero, Luiz Henrique no perdonó al recibir un centro desde fuera del área de Igor Jesús, avanzarse a la defensa y rematar de cabeza al fondo de la red.
El Palmeiras no se vino abajo y reaccionó rápidamente. Con una alta presión, acabó forzando un mal lanzamiento en largo del portero Jhon, que recuperó la Gustavo Gómez en el centro del campo.
El paraguayo asistió con la cabeza a Raphael Veiga, que de primeras, combinó con Rony, quien la devolvió de cabeza y Mauricio, entrando al área, soltó un disparo cruzado que puso el empate a 1.
Cuando todo indicaba que el partido llegaría al descanso con empate, Igor Jesús recibió en largo dentro de área, se fue hacia la línea de fondo, vigilado por Vitor Reis, y casi sin ángulo, sorprendió a Weverton con un severo disparo desde la derecha.
– BAJA EL RITMO –
En la segunda parte, el juego bajó en intensidad.
El Botafogo se limitó a controlar el partido e intentar no correr riesgos, y más con la salida del argentino Thiago Almada y el venezolano Jefferson Savarino, sus hombres más creativos en ataque.
En el otro lado, el técnico del ‘Verdao’, el portugués Abel Ferreira, dio entrada al talentoso Estevao y al gran refuerzo esta temporada, Felipe Anderson, aunque los dos, que regresaban al equipo tras superar problemas físicos, entraron poco en juego y apenas se dejaron ver.
En el descuento, el Botafogo rozó el tercero, con un cabezazo del central Alexander Barboza que salió fuera por poco.
Con el resultado, el ‘Fogao’ defenderá un gol de ventaja el próximo miércoles en Sao Paulo para pasar a cuartos.
Ya el Palmeiras estará obligado a ganar ante su afición: si lo hace por un gol, el ganador de la eliminatoria se decidirá en los penaltis, y si gana por dos o más goles de ventaja, pasará directamente a los cuartos de final.